Varios países reportaron casos de viruela símica durante las últimas semanas. Para prevenirla, la OMS recomienda tomar medidas para reducir la exposición al virus, que se transmite entre personas por contacto estrecho con secreciones de las vías respiratorias o lesiones cutáneas, así como objetos contaminados recientemente.
La viruela del mono es una enfermedad viral que se transmite de los animales al hombre y que lleva muchos años de existencia. De hecho, se le llama viruela del mono porque se descubrió primero en un par de brotes que hubo en un laboratorio en Dinamarca en 1958. Lo encontraron en macacos que se utilizaban para experimentación, pero realmente es una enfermedad de roedores, que se transmitió tanto a los monos como a los seres humanos por ser sus predadores accidentales.
Cuáles son sus síntomas
Se caracterizan primero por un dolor corporal. Después comienza un dolor de cabeza fuerte, inflamación de los ganglios y, finalmente, fiebre. Dos o tres días más adelante ya aparecen las ampollas clásicas de la viruela. Son lesiones muy parecidas a las de la viruela humana y un poco parecidas a las del sarampión. Estas ampollas son más grandes que un simple sarpullido y se caracterizan por que contienen pus. Su contenido no es líquido, como las de la varicela.
Cuáles son los grupos de riesgo
Hasta ahora parece que los niños menores de 16 años son los que tienen un riesgo más alto, así como los adultos mayores de 60 años porque a mayor edad, el sistema inmune falla más. Todos tenemos un riesgo similar de enfermarnos, pero la gravedad de la enfermedad va a ser mayor en estos grupos y entre personas con comorbilidades. Es más o menos igual que con la covid. Las personas con diabetes, hipertensión, obesidad y problemas inmunológicos van a estar más afectadas.
Cómo prevenir la enfermedad
Especialistas recomiendan lavarse frecuentemente las manos, evitar contacto con personas contagiadas como también con su ropa. Lo idea es usar barbijo y lavar correctamente la ropa y usar agua tibia en toallas y otros utensilios que pudieron estar en contacto con alguna persona infectada. Ante cualquier síntoma, acudir con un médico.