El histórico ex arquero de Vélez, José Luis Chilavert, que manifestó sus aspiraciones de postularse como presidente de Paraguay, propuso que su país “se haga cargo de todos los gastos” de los tratamientos médicos que se realicen sus compatriotas en el sistema de salud pública argentino.
Asimismo, el retirado futbolista volvió a cuestionar a los gobiernos populistas y sostuvo que los Estados sudamericanos deberían “unirse todos” para “ser potencia”.
“La manera en la que se ha degradado el país es terrible, pero el populismo que se implementó, y que se sigue implementando, genera eso, porque fomenta la destrucción de la familia, primero, y del Estado, después. Para ellos, mientras exista más gente que no vaya a estudiar, la pueden manejar tranquilamente, porque esa persona siempre va a esperar el dinero del gobierno de turno”, señaló en una entrevista con Viviana Canosa en A24.
Al mismo tiempo, Chilavert propuso un acuerdo entre los sistemas de salud de ambas naciones: “Gracias a la Argentina mis compatriotas pueden ser asistidos gratis cuando van a buscar una operación, por ejemplo, y todos los médicos en todos los hospitales siempre los atienden a la perfección. También es una asignatura pendiente, si uno tiene esa hermosa oportunidad de estar en el poder, hablar con el gobernante de turno y decirle que cuando una persona viene de Paraguay, obviamente, el gobierno de Paraguay se debería hacer cargo de todos los gastos que genera ese compatriota que vino a operarse en la Argentina, y viceversa. Así vamos a tener países amigos”, argumentó.
También, dio su perspectiva sobre la vicepresidenta y aseguró que él no ve que “haya dejado un legado saludable”, sino que “se ha manejado muy mal, han crecido las villas y ese no es el camino; se han fijado en Cuba, en Venezuela y, obviamente, ha errado”.
“Yo he escuchado a muchos políticos que han estado en el poder decir que el poder marea. Todos los gobernantes que siguen el sistema socialista no han leído a Simón Bolivar, que dijo siempre que lo mejor que le puede pasar a un gobernante es, cuando se le termina el poder, irse a su casa. ¡Éstos son eternos!”, concluyó.