La crisis en la Escuela de Enfermería de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) atraviesa su momento más álgido. Ayer se vivieron momentos caóticos, con forcejeos y denuncias cruzadas de agresiones entre las autoridades y los estudiantes, que tienen tomada la institución hace más de 10 días como medida de fuerza. La escalada de tensiones llegó a un punto crítico y en el Rectorado buscan descomprimir la situación. Por eso, convocaron a las partes a una reunión tripartita, desde las 11, con el fin de abrir canales de diálogo, estudiar la factibilidad de los reclamos y que se suspenda la toma.
Los docentes y estudiantes tienen tres pedidos principales: que la Escuela sea Facultad; que deje de depender de la Facultad de Medicina y pase a la órbita del Rectorado de la UNT; y poder elegir sus propias autoridades.También solicitan que se solucionen las carencias que tiene la institución, como contar con dos baños para miles de estudiantes.
Postura y rechazo
El secretario general del Rectorado, José Hugo Saab, contó a LA GACETA se comunicaron con docentes que están en la toma para convocarlos a una mesa tripartita con representantes de: la Facultad de Medicina, que encabeza Mateo Martínez; el Rectorado, a cargo de Sergio Pagani; y del grupo que impulsa la protesta, con el condicionamiento de que suspendan la medida de fuerza mientras se mantenga el canal de diálogo.
“Estamos evaluando con el decano de que se considere la posibilidad de que la Escuela pase a depender del Rectorado. Y segundo, el tratamiento en el Consejo Superior para el análisis (de la propuesta de ser Facultad). Hace falta el análisis de los planes de estudios, financiero y edilicio en función de transformar la Escuela en Facultad. No vamos a ser irresponsables de aprobar un plan de estudio que no se conoce”, desarrolló Saab.
El funcionario repudió los actos de violencia sucedidos ayer y cuestionó las explicaciones que dio la flamante directora de Enfermería, Rossana Moyano. “No podés romper una huelga con el pretexto de limpiar. Tenés que dialogar, no cambiar la cerradura y entrar. Estoy en contra de la toma, pero la respeto”, dijo.
“Alguien no sabe perder”
A título personal, Saab agregó que vio una intransigencia inusitada de parte de los manifestantes y consideró que la protesta cuenta con el apoyo de sectores ajenos a la Escuela y a la vida universitaria. “Dudamos de que haya alguien que no haya entendido que la democracia en la universidad nos ha dado por ganadores en la Asamblea y no sabe perder. Y no hablo de gente universitaria, sino de gente extrauniversitaria”, lanzó.
Limpieza y desayuno
En diálogo con LG Play, manifestantes y autoridades de la Escuela de Enfermería se acusaron de haberse agredido mutuamente física y verbalmente. Los jóvenes afirmaron que eran pocas las personas que se quedaron a dormir y que se despertaron por los ruidos en la puerta por el cambio de la cerradura. “Entraron de la nada, nos agarraron de sorpresa. Éramos un varón y cinco mujeres. Nos podían haber hecho cualquier cosa. Nos asustamos”, relató María, una alumna.
Moyano fue designada por el decano Martínez como directora de la Escuela desde el 27 de mayo (Decreto 285/2022). En diálogo con este diario, la titular de Enfermería dio su versión de los hechos. Afirmó que ingresaron al edificio de General Paz al 800 por “aparentemente no había nadie”. “Pensamos que abandonaron la toma. Empezamos a limpiar para abrir las puertas y empezar a trabajar. Por otra parte, se llamó a un cerrajero porque con la toma los alumnos venían manejando la llave; sobre todo porque nos preocupa toda la documentación de la Escuela. En eso un grupo pugnaba por entrar. Ahí se ha producido un tironeo. Después descubrimos que en un aula había cinco estudiantes; les ofrecí desayunar y los invité a dialogar”, manifestó la directora, que está secundada por Norma Beatriz Romero.
Tensiones internas
Moyano reconoció que la Escuela tiene carencias y que los recursos humanos como los edilicios son insuficientes. Afirmó también que su intención es continuar el proyecto, dijo que hoy hará una presentación formal ante el Rectorado, pero aclaró que la decisión está en manos del Consejo Superior. A su vez, apuntó contra las autoridades anteriores (el mandato finalizó el 14 de mayo) por la escalada del conflicto. “Las autoridades salientes son algunas de las que están movilizando al estudiantado. Imagino que será con aspiraciones de continuar en la gestión”, dijo.
La ex directora Angelina Liezún, por su parte, repudió los hechos de violencia ocurridos ayer y afirmó que los agresores eran personal del Decanato. Cuestionó que Martínez no haya permitido que el personal de Enfermería participe de la elección de las nuevas autoridades y solicitó la pronta desvinculación de la Escuela de la Facultad de Medicina. “Somos esclavos de una Facultad que no nos da nada pero maneja nuestros recursos. En mi gestión denunciamos lo que pasaba. Enfermería ya no se sostiene del zapato del médico”, dijo.
Olla popular a las 12: Adiunt rechazó que haya “patotas” en la UNT
En el marco del paro nacional universitario, Adiunt convocó a una olla popular en la Escuela de Enfermería, a las 12, bajo el lema “basta de patotas en la UNT”. El secretario general, Ariel Osatinsky, apoyó la toma y repudió las agresiones. “Hemos retrocedido a 2014, cuando ocurrió la toma del Rectorado: una patota fue enviada por las autoridades del momento, irrumpió y violentó los derechos de los estudiantes. Acá está pasando lo mismo, cuando se trata de una toma pacífica”, manifestó.