Luego de que el martes consiguiera firmar dictamen de mayoría en un plenario de comisiones, la oposición resolvió apurar el debate sobre la boleta única de papel en el recinto de la Cámara de Diputados, al pedir una sesión especial para votar específicamente ese proyecto de ley, a sabiendas de que, a priori, cuenta con los votos necesarios para aprobarlo.
El pedido de sesión consiguió un importante volumen político y la prueba es que la nota enviada a la presidencia de la Cámara baja, a cargo de Sergio Massa, lleva nada menos que 35 firmas, no solamente de los referentes de las bancadas de Juntos por el Cambio, sino además del Interbloque Federal, de Juntos Somos Río Negro y del bloque de José Luis Espert.
Se trata de las mismas bancadas, excluyendo al Partido Obrero, que en la sesión de principios de mayo se unieron para votar el emplazamiento de las comisiones para que traten el proyecto de ley.
Rodrigo de Loredo, diputado nacional, dijo a Cadena 3: “Hemos pedido una sesión especial porque el Ejecutivo no está dispuesto a acompañar esto; hemos logrado los 116 votos de Juntos por el Cambio y acompañan bloques intermedios, y con ese número podemos obligar a que se trate y tenga sanción en la Cámara de Diputados”. “La Boleta única se aplica en gran cantidad de distritos con resultado exitoso, no es sólo 16 países no lo aplican”, dijo.
“La Boleta Única no va a resolver todos los problemas de la democracia argentina, tenemos un problema de fondo que es la utilización de la pobreza como instrumento electoral, y hay una expresión política, que es el peronismo, que se sirve de los conglomerados pobres para asistirlos desde el Estado y convertirlos en clientes”, criticó.
En el Senado, en cambio, no hay tanta claridad sobre lo que podría suceder. En teoría, el Frente de Todos podría imponerse para bloquear el avance del proyecto, ya que tiene una ajustada mayoría y, encima, controla las comisiones clave donde el tema tendría tratamiento. De todos modos, en la oposición creen que hay tres senadores, el jujeño Guillermo Snopek, el correntino Carlos Espínola y el entrerriano Edgardo Kueider, que podrían torcer en resultado a favor de la implementación de la boleta única, ya que en el pasado se han manifestado en favor de la iniciativa. Si eso sucediera, se presentaría el escenario de un resonante triunfo opositor, ya que someterían al presidente Alberto Fernández a un dilema sin salida provechosa para él y su gobierno: acepta a regañadientes la boleta única o veta la ley, con el costo político que eso supondría.
Proyecto: la idea en estudio
Se condensaría toda la oferta electoral para cargos nacionales en una única planilla de papel, la cual se divide en filas horizontales para cada una de las agrupaciones políticas que compiten. Por cada tramo y por cada alianza electoral, habrá un casillero vacío. El elector deberá seleccionar solamente una opción por cada categoría: si marca dos o más casilleros, el voto se considerará nulo. En tanto, si no marca ningún casillero, se considerará voto en blanco.