02 Junio 2022
El Teatro Estable de Títeres y Marionetas del Ente Cultural de Tucumán, bajo la dirección general de Romina Muñoz, continúa con su intensa actividad en diferentes espacios de la capital y el interior.
La obra que se presentará en esta oportunidad será “Sirulfo y El Diablo”, a cargo de los titiriteros Luciana González y Maximiliano Farber, con técnica de Héctor Lobo. La misma obra volverá a subir a escena en esa sala el jueves 30 a partir de las 15:30h.
Por otro lado, las funciones del elenco en el interior continuarán este viernes 3 a las 15:30h. en la Plaza principal de Lules, donde las titiriteras Ana Hynes y Solana Carrizo presentarán la obra “El Propietario y El buen Diablo”. Con esa misma obra, las titiriteras llegarán el viernes 24 a Santa Lucía (Monteros), para ofrecer una nueva función desde las 9:30.
El elenco fue fundado en el año 2007 por Carlos López y Héctor Lobo, y desde ese momento visita espacios de primera infancia, de adolescentes y también hogares de adultos mayores, de la capital y el interior de la provincia, con distintas propuestas artísticas.
Recorremos escuelas de la ciudad y del interior, también escuelas rurales y de alta montaña, con la coordinación del Ministerio de Educación. Además, bajo la coordinación del Ministerio del Interior, visitamos diferentes comunas, comedores, plazas y distintas organizaciones barriales”, nos cuenta su directora Romina Muñoz.
El objetivo central del elenco es poder acercar a los espacios de difícil acceso, todas esas propuestas que también están disponibles en las salas de la capital.
Muñoz nos comenta que, actualmente, el elenco estrena entre una y dos obras por año, y que esas obras quedan en cartel para tener una mayor variedad de propuestas para los espacios que se visitan. El espacio de trabajo del grupo es el taller Carlos López, ubicado en el Ente Cultural: “ahí trabajamos en la construcción plástica de los títeres y de la escenografía de cada una de las obras, también en las dramaturgias, que están bajo mi responsabilidad”, explica.
La directora no duda al afirmar que los titiriteros y titiriteras que forman parte de este elenco tiene un espíritu comunitario, y que son artistas de territorio, cuyo trabajo fundamental es recorrer toda la provincia. “En muchos casos, se trata del primer contacto que los chicos tienen con el teatro, y para nosotros es un orgullo ser los responsables de eso, y también de llevar la bandera del elenco y del Ente Cultural a estos lugares tan recónditos”, asegura antes de despedirse, no sin antes dejarnos una última reflexión: “recibir el agradecimiento sincero por parte de la comunidad, al finalizar una presentación es siempre muy conmovedor. El nuestro es un trabajo muy gratificante”.
A través de un pedido, que las instituciones interesadas deben presentar por mesa de entrada del Ente Cultural, es que se programan las funciones que se organizan en los diferentes espacios de la capital y el interior.
Sobre las obras
“Sirulfo y el Diablo” cuenta la historia del reconocido titiritero Kike Sánchez Vera y su lucha por los derechos laborales. Sirulfo y su opresor ponen en juego el lugar del titiritero y del títere. Utilizando una estética contemporánea, el elenco trabaja alrededor del concepto de poder como lo expresa Foucault: “Pasa por los dominados tanto como por los dominantes; ya que pasa por todas las fuerzas en relación”.
“El Propietario”, de Roberto Espina, es una obra de encuentros y desencuentros, que gira alrededor de dos personajes. Una obra que cuestiona qué es lo propio y lo ajeno. ¿Podrán los personajes llegar a un acuerdo? Por su parte, “El buen Diablo”, es una versión de la obra del poeta y titiritero catamarqueño Kique Sánchez Vera. En un juego de picardías y enredos se mostrará cómo los estereotipos físicos y las convenciones muchas veces no tienen sentido.
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