El gobierno del presidente Joe Biden revocó ayer una serie de restricciones a los vuelos a Cuba impuestas durante la administración de Donald Trump, incluido el término de una prohibición de vuelos estadounidenses a aeropuertos cubanos que no sean La Habana.
El Departamento de Transporte de Estados Unidos (USDOT, por su sigla en inglés) emitió la orden a pedido del secretario de Estado, Antony Blinken, quien dijo que la acción era "en respaldo del pueblo cubano y en los intereses de la política exterior de Estados Unidos".
El mes pasado, la Casa Blanca había señalado la medida planeada como parte de una revisión más amplia de la política hacia Cuba. Las restricciones de vuelo se han levantado con efecto inmediato.
El gobierno de Trump había emitido una serie de restricciones aéreas en 2019 y 2020, en un intento de aumentar la presión económica de Estados Unidos sobre el Gobierno cubano.
Las medidas incluían la prohibición de que las compañías aéreas estadounidenses vuelen a ocho aeropuertos internacionales de Cuba fuera de La Habana, incluidos los de Camagüey, Cayo Coco, Cayo Largo, Cienfuegos, Manzanillo, Matanzas y Santiago de Cuba.
Bajo el mandato del presidente Trump, el USDOT impuso un límite a los vuelos chárter a Cuba de 3.600 al año y posteriormente suspendió los vuelos chárter privados a Cuba. El departamento también prohibió los vuelos chárter a cualquier aeropuerto cubano, excepto La Habana.
El entonces secretario de Estado, Mike Pompeo, explicó que Cuba "utiliza los fondos del turismo y los viajes para financiar sus abusos y su injerencia en Venezuela. No se puede permitir que los dictadores se beneficien de los viajes de Estados Unidos".
Durante ese periodo, el USDOT sí permitía los vuelos chárter públicos autorizados hacia y desde La Habana y otros vuelos chárter autorizados "para fines médicos de emergencia, búsqueda y rescate, y otros viajes que se consideren de interés para los Estados Unidos".
Con las aerolíneas estadounidenses enfrentando vuelos completos y algunas enfrentando escasez de empleados, no está claro cuántos nuevos vuelos a Cuba podrían agregarse.
Como resultado de la orden, el USDOT desestimó como obsoletas las solicitudes pendientes de exenciones de emergencia y de asignación de vuelos chárter públicos a La Habana.