31 Mayo 2022
Dos disidentes cubanos enfrentaron su primer día de juicio luego de ser detenidos hace casi un año, como parte de un proceso que grupos internacionales de derechos humanos califican como “una farsa”. Los artistas Luis Manuel Otero Alcántara y Maykel Castillo son miembros del opositor Movimiento San Isidro, que tiene sede en La Habana, que encabezó protestas antes de que muchos de sus integrantes salieran de Cuba denunciando represión.
Otero Alcántara es acusado de delitos como ultraje a los símbolos patrios, desacato agravado y desorden público, mientras que a Castillo se le imputa agresión y desórdenes públicos. Ambos enfrentan penas de siete y 10 años de cárcel, respectivamente.
El Tribunal de La Habana estaba rodeado de policías y fuerzas de seguridad desde las primeras horas de la mañana. A un pequeño grupo de familiares se le permitió el acceso al juzgado, pero otros, entre ellos representantes de embajadas en La Habana de varios países europeos se agruparon a una cuadra del Tribunal esperando acceder durante casi dos horas tras hacer una petición formal para ingresar y observar el proceso. Activistas y amigos de los disidentes denunciaron en redes sociales que estaban bajo vigilancia de la seguridad del Estado.
Medios estatales cubanos, incluido “Granma”, diario del gobernante Partido Comunista, califican al Movimiento San Isidro de Otero Alcántara y Castillo como parte de un intento de “golpe suave” dirigido por Estados Unidos. El gobierno cubano califica a los disidentes como mercenarios pagados por Washington. (Reuters)
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