Osvaldo Jaldo está entre la espada y la pared. Por un lado, afronta los reclamos cotidianos del sector productivo por acciones que tiendan a regularizar la provisión de gasoil en plena zafra citrícola y sucroalcoholera. Por el otro, debe mantenerse en sintonía con el pensamiento de la Casa Rosada porque su compañero de fórmula, Juan Manzur, tiene un puesto clave en la estructura oficial. En ese sentido, el vicegobernador en ejercicio del Poder Ejecutivo llamó a la Nación a evitar “la fuga” del combustible en las fronteras, una situación que agudiza el abastecimiento interno. “Como dijo el jefe de Gabinete, es fundamental realizar tareas de fiscalización en destilerías, distribuidoras y petroleras y más controles en las fronteras respecto de las compras que se realizan. Paralelamente, hay que evitar por todos los medios la especulación con el precio de un insumo clave para todas las producciones”, expuso Jaldo ante LA GACETA. La provincia enfrentará la semana que viene una medida de fuerza que puede llegar a resentir su aparato productivo y de abastecimiento de mercaderías en general. “La falta de gasoil, un insumo considerado esencial para la puesta en circulación de nuestras unidades de transporte, se encuentra afectando gravemente el normal funcionamiento de la actividad”, explicaron los transportistas.
El gobernador interino había dicho que, pese al faltante, todavía no se había resentido la actividad en ingenios, citrícolas u otras industrias. “En un primer momento habíamos planteado la situación del gas y gracias a un acuerdo entre el Gobierno nacional con su par de Bolivia se alcanzó ciertas garantías para su abastecimiento”, recordó. Y reconoció que la preocupación central del bloque regional está dado por la provisión del gasoil del cual depende el desarrollo de las economías regionales. “Todos coincidimos que se trata de una prioridad, pero nobleza obliga a decir que el Gobierno nacional está realizando un enorme esfuerzo para abastecer de ese combustible a la República Argentina”, fundamentó.
Jaldo, a su vez, indicó que si bien Tucumán hoy tiene un problema de escasez de ese combustible y hasta cupificación al momento de realizar la carga, no se ha resentido actividad alguna al borde de paralizarla. “El precio que se está cobrando no representa la realidad de lo que verdaderamente cuesta ese combustible. Ya hemos escuchado de boca del jefe de Gabinete que se van a tomar medidas para evitar esas conductas especulativas”, puntualizó.