28 de mayo de 1900. Un hombre, apurado, se acercó a un restaurante en Connecticut (Estados Unidos) con un peculiar pedido que desorientó a los cocineros. “Quiero algo rápido, pero que sea rico”, fueron las palabras con las que el inmigrante alemán -sin querer- dio inicio a una de las comidas más difundidas en el mundo. Y es que, por puro azar, los cocineros armaron y le entregaron una carne entre dos panes. Así nació la hamburguesa.
Bueno... esa es una de las historias difundidas. Lo cierto es que versiones sobre su creación hay muchas: hay quienes dicen que surgió en la ciudad de Hamburgo, que los romanos ya las cocinaban, que un vendedor ambulante estadounidense fue el de la idea... Sea como sea, cada 28 de mayo se celebra el Día Internacional de la Hamburguesa. En Tucumán no pasan desapercibidas; junto al sánguche de milanesa y a la pizza, es una de las comidas más elegidas.
Hay de todos tipos, sabores y texturas. Por suerte, la oferta en la provincia es amplísima. Al parecer, los tucumanos son fanáticos de las burgers. “Es una cultura que se instaló en todo el mundo y nosotros no estamos ajenos a eso, y tenemos que aggiornarnos”, explica a LA GACETA Pablo López, de la cervecería Patagonia (tiene 15% de descuento con Club LA GACETA de lunes a miércoles en la sucursal del Abasto) “Tiene que ver con lo que es la hamburguesa gourmet; tiene una elaboración casera, con elementos a los que no estamos acostumbrados”, agrega.
Un boom de sabores
Con palta, con mostaza dijon y miel, con hongos... Hay hamburguesas para todos los paladares, pero la gran estrella es la americana. “Generalmente se pide lo clásico, con cheddar y panceta que es la que más sale”, dice López. El dato y las percepciones son avaladas por otros restaurantes: “Salimos un poco de lo tradicional, de la clásica hamburguesa y se está levantando mucho la vara; hay muchos lugares con hamburguesas muy buenas. Y sí, las que más se venden son las que tienen cheddar”, asegura Gabriel Prados, gerente de Porter Brew House (ofrece 15% de descuento con Club LA GACETA de lunes a miércoles en sus sucursales de capital y Yerba Buena).
“Lo que sucede es que ha cambiado un montón la propuesta de hamburguesas que hay en Tucumán. Se han empezado a ver cosas que antes no existían, y a preparar de maneras que no eran comunes. Ese es el principal motivo: se han mejorado los procesos para dar hamburguesas de calidad”, asegura Mauro Tula, gerente de la sucursal de Yerba Buena de Castilla Jardín Cervecero (también tiene el 15% de descuento con club LA GACETA de lunes a miércoles, en sus dos jardines). Allí también la estrella es la americana.
Elaboración, la clave
No hay dudas de que lo que distingue a las hamburguesas hoy es la preparación. Lejos quedaron los tiempos en los que se compraba el pan y la carne lista en el supermercado. Hoy los restaurantes preparan todo, desde cero. “La clave es la materia prima, que tiene que ser de buena calidad. Nosotros tenemos un buen blend de carne (se usa carne de distintos tipos para preparar los discos de hamburguesa) y un buen pan. Con eso ya tenés el 90% del plato”, dice Tula.
Todos coinciden en que un blend de carne de calidad garantiza una buena hamburguesa. “Que sea tan elegida hoy la hamburguesa tiene que ver con que uno también busca algo rápido para comer, pero que sea rico y un buen acompañamiento para tomar una cerveza, para compartir con amigos... El mayor público consumidor es el desde los 20 a los 40”, indica César Nuñez, dueño de Olsen Beer & Bristo (también con el 15% de descuento con Club LA GACETA de lunes a miércoles). “En nuestro caso sale mucho la hamburguesa Argentina, que tiene jamón, queso y huevo; esa es como la tradicional, la que comíamos en las sangucherías, pero la preparamos de una forma más gourmet”, aclara.
“Con esta preparación uno siente mucho más el sabor de la carne. Cuando era más chico, mi papá le ponía sólo ajo y perejil a la hamburguesa; ahora se condimenta solamente con pimienta y sal. Eso se manda a la plancha con un poquito de manteca y estamos muy atentos al punto de la carne. Se mejoró mucho la técnica y empezamos a prestar más atención a los insumos para resaltar más el sabor de la carne. Esa es la clave”, resume Prados.