El lunes pasado, previamente a que el Ministerio de Salud informará de la existencia de “alta probabilidad” de que el caso sospechoso esté infectado por el virus de la viruela del mono, el paciente se enteró que los estudios habían dado positivo para la infección, convirtiéndose en el primer contagiado del país y de la región.
Según lo informado por La Nación, el paciente, que rondaría los 40 años de edad, había regresado de España (uno de los países con más casos en el mundo) cuatro días antes de visitar una clínica porteña, donde está aislado y en buen estado de salud en general. Vale recordar que el paciente llegó con dos síntomas manifestados en su cuerpo: fiebre y algunas ampollas sobre su piel.
Asimismo, el domingo pasado se difundió el comunicado que decía que “Salud informa acerca de un sospechoso caso de viruela simica”. Para entonces, al paciente se le habían tomado diversas muestras que analizaron diversas áreas del Departamento de Virología del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (INEI) de Anlis Malbrán.
A partir de ello, se aislaron el paciente y por lo menos una de las personas de su núcleo familiar. Además, se está llevando a cabo el seguimiento preventivo del personal de salud de la clínica que lo atendió en la primera consulta y el personal tratante.
Como el aislamiento que se debe seguir para estos casos es respiratorio y de contacto, toda persona que ingresa a la habitación lo hace con un equipo de protección personal. Esta prevención incluye al personal de salud, porque la manipulación de ropa de cama y los utensilios para la comida debe seguir un circuito separado de esos elementos del resto de pacientes.