En el estadio Mario Kempes de Córdoba se define esta tarde el primer título de la temporada. Boca y Tigre llegaron a la final de la Copa de la Liga, justamente tres años después del primer título en la historia del “Matador”, conseguido nada menos que frente a los “Xeneizes”.
Fue un primer tenso. El nerviosismo de la final se sintió en la cancha. Y estos 45 minutos podrían haber terminado en tablas sin goles, de no ser porque en tiempo suplementario el arquero de Tigre cometió un error que le dio, a Boca, la merecida ventaja.
En ese momento el partido ya estaba parejo: los equipos se repartían la pelota entre un área y la otra, generando más bostezos que otra cosa.
Tigre recién tuvo su primera jugada clara a lso 37 minutos de ese primer tiempo: El remate fue desviado al córner y todo se diluyó.
A los 17 minutos Boca gritó gol. Pero después fue anulado: Darío Benedetto definió con enorme categoría, pero el VAR confirma lo que inicialmente había marcado el árbitro asistente Yamil Bonfá: que su brazo izquierdo estaba en posición adelantada.
Segundo tiempo
Tigre salió con todo. Metió a Boca contra las cuerdas y tuvo varias jugadas claras.
Y cuando El Matador estaba más cerca del empate, Frank Fabra se disfrazó de Roberto Carlos y de un zapatazo a tres dedos marcó el segundo gol para Boca, a los 25 minutos del segundo tiempo.
El tercer gol fue casi anecdótico: Luis Vázquez, de cabeza, marcó el tercero para el Xeneize, campeón de la Copa Liga Profesional.