El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ordenó la prohibición de la entrada -de manera permanente- a ese país de su homólogo de los Estados Unidos, Joe Biden, al igual que casi un millar de ciudadanos y funcionarios norteamericanos, en respuesta a las sanciones de la Casa Blanca a Moscú por la guerra en Ucrania.
“Recalcamos que las acciones hostiles de Washington se volverán como un bumerán contra EEUU y serán rechazadas como es debido”, afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia este sábado, en un comunicado, al anunciar la medida.
Moscú subrayó que “las contrasanciones rusas tienen carácter obligado" y apuntan a forzar "al régimen gobernante estadounidense, que intenta imponer al resto del mundo un orden mundial neocolonial basado en reglas, a cambiar su conducta y a reconocer las nuevas realidades geopolíticas”.
“Rusia no busca la confrontación y está abierta a un diálogo franco, respetuoso, diferenciando al pueblo estadounidense, que siempre ha gozado de nuestro respeto, de las autoridades de EEUU, que alientan la rusofobia, y de aquellos que les sirven. Precisamente estas personas se incluyen en la ‘lista negra’ rusa”, añadió Exteriores.
Biden figura en la lista, ordenada alfabéticamente en ruso, con el número 31, seguido de su hijo Hunter.
Entre los altos cargos estadounidenses sancionados se encuentran, entre otros, el secretario de Estado, Antony Blinken, el titular de Defensa, Lloy Austin, y el director de la CIA, William Burns.
En total, la "lista negra" de Putin contabiliza 960 funcionarios y ciudadanos estadounidenses, detalla Infobae.
Las sanciones fueron anunciadas poco después de que Washington informara de que Biden promulgó en Seúl el proyecto de ley que contempla un paquete de ayuda adicional a Ucrania por casi 40.000 millones de dólares.
En paralelo a la guerra por la invasión a Ucrania, Rusia presiona para que Suecia y Finlandia desistan de aliarse de manera formal a la OTAN, una posibilidad que incrementa las tensiones en Europa.