Una luz de esperanza para la familia de Lola Chomnalez, la joven asesinada en 2014 en una playa de Roca (Uruguay). Hace siete años, que Adriana Belmonte y Diego Chomnalez buscan la verdad sobre el femicidio de su hija. El jueves detuvieron al principal sospechoso luego de que los investigadores encontraran rastros de su ADN en la mochila de la adolescente. Está procesado por homicidio especialmente agravado.
Tras enterarse de la detención del hombre de 39 años con antecedentes penales por lesiones y violación, el papá y la mamá de Lola espera para viajar a Uruguay y conocer detalles sobre el operativo. En diálogo con TN, Adriana Belmonte expresó la sensación que le produjo la noticia tras siete años de espera y de impunidad. Recordamos que hasta ahora hay un solo detenido en el caso. Se trata del cuidacoches Ariel Moreira, quien está imputado por encubrimiento agravado pero no se le adjudica la autoría del femicidio.
“Queremos resguardarnos y ser cautelosos. Siento una mezcla de emociones todas juntas. Predominan el alivio y la esperanza”, dijo Adriana a TN. Por su parte, los abogados de la familia ya se encuentran en ese país, a la espera de las distintas medidas que ordene la fiscalía a cargo de la investigación por el caso.
Tras su detención, el sospechoso fue trasladado al Departamento Judicial de Rocha, donde declaró ante la fiscal del caso, Jéssica Pereira; y el juez de Primera Instancia de esa jurisdicción, Juan Manuel Jiménez Vera.
Por su parte, Diego Chomnalez, padre de la víctima viajó a fines de abril a Montevideo y se reunió con el fiscal de la Corte, Juan Gómez, para interiorizarse de las últimas novedades de la causa y solicitar junto a sus abogados que continuasen con la búsqueda de los otros copartícipes del crimen.