Legisladores del Frente de Todos (FdT) presentaron un proyecto en la Legislatura provincial para establecer en qué sitios estaría permitido y en qué lugares estaría prohibido arrojar las cenizas de los difuntos sometidos a los procesos de cremación.
En principio, el texto contempla sanciones para el incumplimiento de esta disposición, aunque no consigna de manera específica en qué consistiría la penalización.
La propuesta es impulsada por la oficialista Norma Mariela Reyes Elías, y cuenta con la firma de otros 13 miembros de la bancada oficialista del FdT.
El objeto de la iniciativa es modificar la ley 9.307, que regula el funcionamiento de los crematorios en Tucumán, para establecer las pautas mínimas relacionadas a la ceremonia de dispersión de los restos de los difuntos.
En el artículo 1° se propone que, por un lado, "serán depositarios de las cenizas los sectores de los cementerios o crematorios especialmente habilitados para este fin" o "lugares religiosos reservados a este efecto".
"La dispersión de las cenizas sólo será permitida en terreno privado y se llevará a cabo con la expresa autorización del propietario", añade la propuesta.
Este acto, añade se encuentra prohibido "en lugares públicos habilitados". "En caso de hacerlo en lagos y cursos de agua, será permitida si no hubiera construcciones en los alrededores", aclara. Y señala que "el incumplimiento del presente artículo será pasible de las sanciones establecidas por la legislación local".
En otro apartado, además, se indica que "el destino final de la urna, una vez dispersadas las cenizas en su totalidad, es de exclusiva responsabilidad de la familia del difunto", que deberá "optar por reutilizar, reciclar, donar, enterrar (sólo en caso de urnas biodegradables) o bien conservar". "No está permitido arrojarla con las cenizas", añade el texto.
La propuesta está fundamentada en que "cada vez es más común optar por la cremación o incineración de nuestros familiares difuntos". "Al no haber una norma específica sobre cómo y dónde se dispersan, entran en juego las libres interpretaciones", remarca el proyecto de ley.
Además, alude a la noticia publicada en LA GACETA sobre un fanático de Racing que había arrojado las cenizas de un ser querido en la cancha en pleno partido, ocasionando que los restos cayeran sobre otros hinchas. "Esto motivó que muchas personas se vieran afectadas, al menos desde un sentir íntimo, porque esas cenizas les cayeron encima", señala el texto.
En los argumentos, por otra parte, se remarca que "las mínimas restricciones" propuestas para estas ceremonias "están justificadas en razones de orden público, protegiendo intereses o valores culturales y morales, y el sentir y dignidad de las personas vivas y difuntas".