En medio de las duras críticas que recibe del núcleo duro del kirchnerismo, el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, reafirmó las políticas implementadas por su gestión, al señalar que su principal ocupación es que "Argentina pueda seguir en la senda de la recuperación económica", a la que calificó como "muy clara" y "fuerte".
"Estamos dando pasos importantes, buscando unir el corto plazo con el mediano plazo, que es algo a lo que no estamos demasiado acostumbrados en la Argentina, para que el país siga en una senda que sea de desarrollo económico de verdad", aseveró el funcionario de Alberto Fernández, en una entrevista con Urbana Play.
Guzmán consideró que es "fundamental seguir adelante con un esquema de política económica que sea consistente, que se pueda sostener en el tiempo, que apunte a estos objetivos de empleo, y poder contener y luego bajar la inflación".
"Hay un objetivo absolutamente compartido por todos los que formamos parte de este gobierno: que el salario real debe crecer", añadió.
En ese marco, aseguró que "están las condiciones dadas para que se vayan fortaleciendo los salarios reales" y "la dinámica sea menos heterogénea que el año pasado".
"Vamos a mantener la discusión en el Consejo del Salario apuntando a que el Salario Mínimo, Vital y Móvil crezca en términos reales", enfatizó.
Por otro lado, sostuvo que es "bienvenido el debate de ideas". "Hay cuestiones que en cierto momento han andado y otras que no han andado. Nosotros lo que hemos trazado es un programa sobre bases que consideramos firmes, sensatas, para que esto ande", indicó.
Y advirtió: "uno se pregunta en qué país del mundo ha funcionado, para encauzar un sendero de desarrollo con inclusión social, tener subsidios energéticos por 3 o 4 puntos del Producto". Además, se preguntó: "¿en qué país del mundo funciona que haya déficits persistentes financiados por una moneda que la gente, por la inflación, empieza a dejar de querer? No hay evidencia, ni ninguna articulación teórica que diga que eso funciona".
Guzmán, luego, hizo una valoración de la administración de Cristina Fernández de Kirchner, actual vicepresidenta, cuando estuvo al frente del Ejecutivo, entre 2007 y 2015. "(Durante el gobierno de CFK) hubo una protección social muy activa: la Asignación Universal por Hijo fue un gran logro. Una fuerte recuperación de los ingresos de las jubiladas y los jubilados. Hubo logros importantes, pero también hubo problemas de consistencia macroeconómica", advirtió.
En esa línea, añadió que, "para que todos esos logros se puedan sostener en el tiempo, tiene que haber consistencia macroeconómica". "Lo que nosotros estamos haciendo es unir el corto con el mediano plazo para que los logros se sostengan en la Argentina", insistió.
En otro tramo de la nota, remarcó que "el no acuerdo con el FMI era ajuste". "Lo que había que lograr era un acuerdo de no ajuste, y eso fue lo que logramos", sostuvo, en alusión a la reprogramación de la deuda que terminó de separar las aguas en el Frente de Todos.
Por otro lado, admitió que en el gobierno tenían conocimiento de que "marzo iba a ser el peor mes en términos de inflación". "Abril es menos malo, pero tenemos un problema en la Argentina con la inflación y hay que atacarla con firmeza, de forma decidida, y eso requiere de un programa económico consistente", explicó.
En cuanto a la disputa en el FDT, Guzmán dijo que la Argentina "no está muy acostumbrada a que los debates internos de una fuerza política sean públicos". "¿Cuáles son las disputas de poder que realmente importan para la Argentina? Son aquellas que logran obtener un resultado de los conflictos que nos fortalecen como Nación, que fortalecen también a las trabajadoras y trabajadores y jubilados", sostuvo.
Y añadió que "un ejemplo de eso fue la reestructuración de la deuda externa del sector público". "Fue un tema medular en nuestra gestión de gobierno. Esa es una disputa de poder. Ahí no tenía a nadie a mi izquierda. En esa situación el poder juega fuerte y en serio: hay intereses creados", remarcó.