En el marco de la 46º Edición de la Feria Internacional del Libro que se desarrolla en el predio de La Rural de la Ciudad de Buenos Aires, el ministro de Educación de la Provincia, Juan Pablo Lichtmajer, presentó su último ensayo “Alberdi: la noble igualdad”, inspirado en el autor intelectual de la Constitución Nacional de 1853.
El pasado sábado, y en una jornada de alta concurrencia, aprovechó el espacio para profundizar en los conceptos que desarrolla a lo largo de más de 230 páginas de análisis de la idiosincrasia que envolvía al prócer tucumano, y explicar cómo las discusiones de hace más de ciento cincuenta años tienen vigencia en la actualidad.
“Todos tenemos motivos para admirar la Constitución de Alberdi. Primero, porque es la firme decisión de ordenar al país. Recordemos que la Argentina había tenido cuarenta y tres años sin encontrar el punto de equilibrio, que es lo que busca Alberdi. El motivo de las guerras civiles era eminentemente económico. La Constitución mantiene tres demandas centrales de las catorce provincias argentinas de entonces: la primera era la libre navegación de los ríos, que era una demanda asociada al litoral; la segunda era tener una Capital Federal; y la tercera, que los impuestos de las exportaciones no quedasen exclusivamente en el puerto de Buenos Aires sino que fuesen distribuidos en toda la Argentina. La distribución equitativa que permita el desarrollo integral de la Argentina en el sentido federal tiene hoy absoluta vigencia”, explicó Lichtmajer en sus reflexiones, en alusión a las declaraciones de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien el viernes dijo que admiraba la Constitución de 1853.
En términos del funcionario “no hay desarrollo posible si no hay una mirada regional de la Argentina. Cada una de las cinco regiones de la Argentina tiene un potencial único e irremplazable. Lo que hace falta es permitir que se generen las herramientas de desarrollo local, desde los municipios a las provincias y a las regiones para que la Argentina se desarrolle de manera multipolar. Nunca ha funcionado un modelo de desarrollo anclado en un punto, porque eso genera un centro y una periferia, y no es ese el modelo de desarrollo que necesitamos".
“Tenemos un país tremendamente centralizado y eso tampoco es bueno para la ciudad de Buenos Aires o para lo que ahora se denomina el AMBA. No puede haber desarrollo con una ciudad rica y una Argentina pobre”, señaló.
Consultado sobre los cambios desde la Constitución alberdiana a la actualidad del país, indicó “hay una serie de cambios en cuanto al planteo retórico y han ocurrido algunos cambios que sería injusto no reconocer en la Constitución del 94. Ha habido cambios en términos políticos, ha habido cambios en términos discursivos. Ha habido idas y vueltas, pero estructuralmente la Argentina sigue adoleciendo de una política verdaderamente federal. Y cuando digo estructuralmente no me refiero solo a lo económico, me refiero también a toda una serie de subordinaciones culturales presentes en la Argentina de hoy”.
En relación a este último punto, destacó que Tucumán trabaja fuertemente en un programa para reivindicar la historia y la cultura local, y promover el sentido de tucumanidad entre los estudiantes de todos los niveles. “Tucumán tiene un programa muy importante de formación continua para las y los docentes con un eje central en educación e identidad. Si sos profesor de Biología o maestra de grado en Naturales, podés enseñar Biología con las especies autóctonas de nuestra flora y nuestra fauna. Si sos profesor o profesora de Física, podés tomar alguna de las grandes obras de infraestructura de Tucumán: El Cadillal, sus diques. Si sos profe de Historia, ni hablar. Si sos de Matemáticas podés hacer cálculos sobre la base de la altura de los cerros, el nivel del mar. Desarrollamos una serie de contenidos transversales para las distintas asignaturas, que es una característica de la educación actual. Enseñamos permanentemente en las aulas un orgullo tucumano y partimos de la base de que un pueblo que no tiene orgullo, está condenado al fracaso”.
La participación del ministro Lichtmajer en la Feria del Libro continuará en el marco de las actividades oficiales que organiza el stand de la provincia de Tucumán, a cargo del Ente Cultural.