El médico terapista Sergio Guillermo Martínez contó el calvario que sufre desde que se enteró que estaban usando su nombre y matrícula para ejercer la medicina.
- ¿Qué dijo ante la Justicia?
- Cómo me entero yo que otra persona estaba utilizando mi identidad y matrícula profesional, que fue de forma casual. Me llegó una foto por Whatsapp de una historia clínica que llevaba mi nombre. Y decía: ‘mirá tenés un mellizo en el sur’. Hice una captura de la firma y tenía mi matrícula. Fui al Siprosa e hice la denuncia. La historia clínica era de septiembre del 2019. Quería establecer si esta persona la seguía usando o fue algo casual.
- ¿Y cual fue el paso siguiente?
- Mi hermana se hizo pasar por una paciente. Todo comenzó el primero de abril, pero yo recién el 18 logro dar con el sanatorio. Y fui hasta ahí con mi hermana. Quería una evidencia fuerte para demandar. Una vez en el lugar al parecer Bustamante reconoce a mi hermana. Entonces la secretaría le dice: el doctor no va a poder atenderte’. Cuando me avisa voy, la encaro y le digo: ‘soy el verdadero doctor Martínez. Dile al sinvergüenza que está usando mi sello y matrícula que venga aquí’. En eso sale de un consultorio un tipo y me dice, ‘venga doctor’.
- ¿Era Bustamante?.
- Me dice ‘soy yo el que está usando su sello’. Entonces le reproché lo que estaba haciendo y le advertí que hasta que no le vea preso no iba a parar. Me imploró que no lo haga porque era su forma de ganarse la vida y que tenía esposa y dos hijas. Se arrodilló y le sugerí que no hiciera esa ridiculez porque así como tuvo el valor suficiente para tomar mi nombre y matrícula, ahora la tenía que tener para enfrentar las consecuencias. Fui a la comisaría a pedir que lo detengan. Pero me dicen que no podían.
- ¿Y qué pasó después?
- Veía que el Siprosa no hacía nada. El expediente había ingresado a Asuntos Jurídicos el 25 de abril. Y me pidieron que vuelva a hablar dentro de 10 días. Les reproché la demora ante un caso grave de ejercicio ilegal de la medicina. Por eso hice pública la denuncia y las cosas comenzaron a moverse más rápido. Ya pasó más de un mes y cualquier prueba puede haber desaparecido.
- ¿Qué novedades tuvo ?
-El miércoles recibí una citación de Concepción. Pero era por una denuncia de mala praxis de Amanda Morales contra el Sanatorio y otros médicos, entre ellos estaba yo. Bueno ahora tengo que demostrar que no era el Martínez que intervino en el hecho.
-Y que considera que pasa con Fiscalización Sanitaria del Siprosa?
- El Siprosa no hace nada. Hay colegas a los que les pasó lo mismo que a mí. Hicieron denuncia en el Siprosa hace meses y hasta ahora no pasó nada. ¿Por que el Siprosa no sale a supervisar quienes son los que trabajan en los centros asistenciales?. A mi me cuesta creer que un sanatorio tenga un tipo trabajando tantos años y su propietario no sepa de quien se trata. Hay muchas cosas que no cierran. Esto crea un estrés tremendo.
- ¿Y qué es lo que más teme en estos momentos?
- Que aparezcan víctimas o parientes de este médico mellizo y quieran tomar represalia contra mí. El Siprosa ya tendría que haber caído con todo contra el falso médico y el sanatorio. Estamos todos locos. En estos tipos de casos la burocracia pone en riesgo vidas de personas. Se está jugando con la salud pública cajoneando expedientes.
- ¿Qué espera ahora?
- Que se active este hecho y que sea un cimbronazo para que en casos similares se actué de forma inmediata.