05 Mayo 2022
COMPRAS. La etapa actual del programa +Precios Cuidados estará vigente hasta el próximo 7 de julio. REUTERS
El incremento de precios evidenciado en los primeros cuatro meses del año provocó que las estimaciones delineadas por el Gobierno Nacional para 2022 hoy parezcan imposibles más que lejanas. Tan solo en marzo, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que elabora el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) registró una variación mensual de 6,7% en los precios y en la región noroeste ese porcentaje estuvo una décima (6,8%) por encima de la media nacional.
Uno de los aspectos más preocupantes de este trabajo indicativo tiene que ver con el aumento de precios experimentados en los alimentos básicos y las bebidas no alcohólicas. En marzo, el último mes relevado por el organismo nacional, este rubro aumentó 8,7% en el norte argentino, pero si se mide desde diciembre de 2021, la suba llega a 21,3%. Y la variación interanual alcanza al 59,9%.
A pesar de que funcionarios del Ejecutivo Nacional se habían mostrado optimistas sobre una posible mejora para abril o mayo, los bolsillo de los y las ciudadanas siguen sufriendo la pérdida del poder adquisitivo del salario. En relación a esto, el último sábado, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, advirtió que la inflación de abril “no viene bien” -todavía faltan ocho días para conocer los números del IPC- y adelantó que el Gobierno espera una baja en mayo.
Ante el optimismo del Gobierno, las consultoras coinciden parcialmente con las previsiones porque estiman que en abril la inflación estaría en torno al 5,5%. Uno de los motivos es la cantidad de aumentos que impactaron en distintos rubros, durante las últimas semanas. La consultora LCG, que mide semanalmente los precios de los alimentos, notó en la última semana de abril una desaceleración fuerte. La suba semanal fue del 0,38%, promedio, contra el 1,73% de la semana previa. El alivio fue explicado por productos estacionales (frutas y verduras). La inflación de alimentos de abril promedió 5,1%, según el estudio publicado en El Cronista .
“Descontrol monetario”
Consultado por LA GACETA, el economista Osvaldo Meloni aseguró que el proceso inflacionario está experimentando una aceleración y remarcó que “la inflación núcleo alcanzó niveles que, anualizados, implican una tasa de tres dígitos”. “El exceso de oferta de dinero para sostener el gasto electoral del oficialismo en las elecciones de medio término está impactando en los precios. La política monetaria suele impactar en los precios con un rezago que, dependiendo del canal de política monetaria y de las expectativas, oscila entre los seis y nueve meses. Si a este descontrol monetario, originado en profundos desajustes fiscales, le agregamos las divisiones políticas dentro del oficialismo, que se supone debe apoyar a su ministro de economía en la lucha contra la inflación, el panorama no puede ser menos alentador”, puntualizó el profesional.
En relación al impacto de la inflación en elementos básicos de consumo, Meloni indicó que en el corto plazo, “los procesos inflacionarios nunca tienen un impacto homogéneo sobre todos los bienes y servicios”. Y agregó: “En un plazo más largo, es esperable que la mayoría de los bienes y servicios de la economía sufran tasas de inflación similares. Fijar la atención en un subgrupo de bienes, como pueden ser los alimentos, nos hace perder de vista qué la inflación es un fenómeno muy pernicioso para toda la economía”.
Nada optimista
El economista precisó que para domar la inflación se necesita “un plan de estabilización creíble que cierre la brecha fiscal poniendo foco en la disminución del gasto público” y detalló que la credibilidad de un plan no solo está dada por la solidez técnica del mismo sino también por la amplitud del apoyo político.
“Es muy probable que la inflación supere el 60% en 2022. Esto implica mayor pobreza, peor distribución del ingreso, aumento de la conflictividad social y, en definitiva, una fuerte caída en el bienestar de la sociedad. Por esto es importante señalar qué la inflación es un impuesto no legislado por el Congreso, que distorsiona precios relativos y por lo tanto afecta las decisiones de inversión, generando pésimas perspectivas de crecimiento en el futuro. La inflación, además, afecta el federalismo, porque al ser recaudado por el Banco Central, genera un desbalance de recursos entre Nación y los gobiernos provinciales”, concluyó.
Stock poco cuidado: el nivel de cumplimiento es del 65%
El último viernes, el secretario de Comercio Interior de la Nación, Roberto Feletti, mantuvo un encuentro con las principales empresas alimenticias que forman parte del programa +Precios Cuidados, con el objetivo de monitorear el abastecimiento de productos y evaluar la evolución de los precios y el nivel de cumplimiento de la iniciativa.
En cuanto al abastecimiento del programa, Feletti manifestó que, en base a un relevamiento hecho por la Dirección de Inspecciones de la Secretaría de Comercio Interior sobre 1350 supermercados del AMBA se observó un nivel de cumplimiento de 65%, mientras que históricamente este número se ubicaba en 75%. “El abastecimiento tanto de +Precios Cuidados tanto en los supermercados como en los comercios de proximidad es una prioridad de nuestro Gobierno y no vamos a permitir ningún tipo de especulación ni abuso en ese sentido”, expresó. Y remarcó que el organismo que comanda no avalará “comportamientos que perjudiquen el acceso a los alimentos de las y los argentinos”.
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