28 Abril 2022
ADVERTENCIA. “Nuestros ataques de respuesta serán relámpagos”, dijo. REUTERS
MOSCÚ, Rusia.- Un ataque “relámpago” será la consecuencia para los países que intervengan en el conflicto bélico de Ucrania, fue la amenaza que lanzó presidente ruso, Vladimir Putin, en el Consejo de Parlamentarios en San Petersburgo, consignaron agencias de noticias internacionales.
Su gabinete ya lo había advertido, pero ahora la amenaza fue en primera persona: “Si alguien, insisto, se dispone a interferir en los acontecimientos en marcha y crea amenazas estratégicas inadmisibles para Rusia, deben saber que nuestros ataques de respuesta serán relámpagos, rápidos”. La advertencia llega poco después de que se conociera, esta semana, que Ucrania y Estados Unidos alcanzaron un acuerdo para la entrega de nuevo armamento para las tropas ucranianas.
El ministro de exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, ya había advertido la semana pasada del peligro de tentar la suerte para una posible Tercera Guerra Mundial. “La inadmisibilidad de una guerra nuclear es la posición de principios de Moscú, el peligro de tal conflicto no debe subestimarse”, declaró Lavrov.
Moscú ya había respondido con más amenazas a Occidente, luego de conocer que el viceministro de Defensa británico avala posibles ataques ucranianos en suelo ruso. En una comunicación oficial del departamento, el Kremlin anunciaba que, si alguien tocaba su propio territorio, no le temblaría el pulso para volver a atacar los centros de mando en Kiev, aunque hubiera personal occidental en ellos.
Por otra parte, el presidente ruso aseguró que se cumplirán todos los objetivos propuestos en esta ofensiva militar desplegada por el ejército ruso en territorio ucraniano. “La operación militar especial garantizará la seguridad de las personas en el Donbás y en Crimea”, sentenció Putin.
El Donbás se ha convertido en el objetivo principal de Putin tras el primer mes de guerra en Ucrania. Por eso era fundamental para la estrategia de Moscú la toma del puerto de Mariúpol, que el Kremlin anunció luego de dos meses de asedio, ya que permitiría establecer un corredor seguro entre el Donbás y la península de Crimea, ocupada por Rusia desde 2014. Con ello, también, cerraría la salida al mar a Ucrania. (Reuters-Especial)
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