Novak Djokovic, el número 1 del ranking ATP, mostró una pobre imagen en el ATP de Belgrado, donde juega completamente de local y además es el organizador del torneo. En lo que fue un camino lleno de obstáculos que le resultaron más complicados de lo esperado, el serbio consiguió meterse en la final. En el partido decisivo perdió por 6-2, 6(4)-7 y 6-0 contra el ruso Rublev y luego de la caída encendió las alarmas: allí reveló que padece una enfermedad desde antes de su participación en Montecarlo.
“No se trata de coronavirus, no quiero dar más detalles, pero es algo que me afecta al metabolismo”, comenzó, y agregó: “Es preocupante tener esa sensación en la pista. No me sentí cansado hasta el final del segundo set. Pero el juego de 5-4 fue largo y entonces comencé a no sentirme bien. También me pasó en Montecarlo”.
“Supongo que el tiempo de recuperación está tardando un poco más de lo que esperaba”, continuó Djokovic, que tendrá esta semana de descanso previo a su participación en los Masters 1000 de Madrid y Roma, en la antesala del que es el gran objetivo del serbio en la gira europea de polvo de ladrillo: Roland Garros.