“Estamos en el horno”, dijo un inversionista que se presentó ayer en el local de Adhemar Capital de Yerba Buena. Esas fueron las palabras que utilizó para referirse a que ayer el local cumplió una semana con sus puertas cerradas. “Nos dicen que sólo atenderán por turno, pero nadie responde a los llamados y a los mensajes. Estamos cansados de dar vueltas. Tendremos que hacer como los catamarqueños que empezaron a perseguir a todos”, explicó M.J.A cuando fue entrevistado por LA GACETA.
En estas últimas horas, el paradero del CEO de la firma Edgar Adhemar Bacchiani era todo un misterio. En un principio, estaba internado en un sanatorio de la vecina provincia, pero en las últimas horas circuló la versión de que se habría retirado a una clínica de Buenos Aires. Otro trascendido daba cuenta de que, por cuestiones de seguridad, fue dado de alta ayer a la madrugada y que habría decidido viajar hacia otra provincia.
La decisión la podría haber tomado, según confiaron fuentes judiciales, después de que un desconocido le tomara una foto en la habitación del sanatorio donde se lo observa sentado sin ningún problema y siendo tratado por el principio de ACV que dijo haber sufrido.
LA GACETA intentó infructuosamente comunicarse con Lucas Retamozo, el representante legal del acusado para conocer su paradero. El martes le había afirmado a nuestro diario que ayer, después de que se reuniera con su defendida, haría declaraciones, pero no cumplió.
Las versiones sobre el paradero del titular de la empresa se conocieron horas después de que el abogado Alfredo Aydar, que representa a los tres ahorristas tucumanos que lo denunciaron, presentara ante la justicia federal un pedido para que el ejecutivo sea revisado por los médicos forenses. “Amparándose en los principios de celeridad procesal, solicitó que se tomen todos los recaudos legales necesarios por la gravedad de los hechos denunciados y las constantes maniobras evasivas y obstructivas del mencionado con el avance de la presente causa”, señaló Aydar en el escrito. También se rumoreó que la sorpresiva internación se debía a que la justicia ordinaria de Córdoba estaba pensando en pedir su detención.
El estado de salud de Bacchiani es clave para los inversionistas. La empresa comunicó a través de las redes sociales que todos las negociaciones y los pagos se suspendieron por el estado de salud del CEO de Adhemar. “Es una de las tantas maniobras que vienen ejecutando para ganar tiempo”, aseguró el abogado tucumano.
Mientras corren las horas surgen más detalles del caso. Al parecer, serían muchos más de 1.300 los tucumanos que esperan la devolución de sus ahorros. Fuentes judiciales estimaron que fueron unos 780 los contratos firmados por los inversionistas. Los acuerdos salían a nombre de una persona, pero en realidad se generaba pool de inversión, es decir, el capital que entregaban era de varios. Ejemplo: los que hicieron la denuncia fueron tres tucumanos que entregaron U$S670.000 y $8 millones.
Mientras tanto, en Catamarca, la tensión sigue creciendo paulatinamente. Ayer varios ejecutivos de la empresa sufrieron la persecución de varios damnificados. Tuvieron que intervenir efectivos policiales para poner calma en la situación.