La Casa Rosada dio su expreso respaldo a la estrategia de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, de fracturar el bloque oficialista del Frente de Todos (FDT) en el Senado de la Nación, con lo cual el gobierno sumaría un miembro en el Consejo de la Magistratura.
“La decisión que tomó nuestro bloque está dentro de los parámetros legales en los cuales está permitido este tipo de accionar”, aseguró este miércoles el jefe de Gabinete de la Nación, Juan Manzur, en un reportaje con el canal Crónica TV.
De esta manera, el ministro coordinador y mano derecha de Alberto Fernández ratificó que, al margen de la interna que atraviesa el peronismo, la decisión de CFK estuvo enmarcada especialmente en la sentencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) que retrotrajo al Consejo de la Magistratura a su antigua composición, quedando a cargo de la "cabeza" del Poder Judicial de la Nación, Horacio Rosatti.
“Esto tiene que ver con una decisión del máximo tribunal de justicia de avanzar con un fallo con el que no estamos de acuerdo. Por eso la decisión de nuestro bloque de avanzar en el marco de esta decisión que se ha tomado es correcta”, analizó Manzur esta mañana.
La estrategia adoptada por la ex jefa de Estado, en tanto, había motivado un duro rechazo de la oposición.
El jefe del interbloque de Juntos por el Cambio, Alfredo Cornejo, denunció que la jugada de CFK tiene como finalidad “robarse un lugar en el Consejo de la Magistratura”.
Sucede que, por impulso de la vicepresidenta, el bloque del Frente de Todos partió en dos la bancada en el Senado. La decisión implica una separación entre “Unidad Ciudadana”, integrado por los senadores kirchneristas, y el “Frente Nacional y Popular”, alineado a los gobernadores.
Según la ley que la Corte volvió a poner en vigencia con sus fallos, el Senado y Diputados deben elegir dos nuevos representantes en el Consejo de la Magistratura que corresponden a las segundas minorías parlamentarias de ambas cámaras. Así, dos senadores le corresponden al bloque que tiene más integrantes; uno al segundo y otro al tercero. Tras el quiebre ficticio del Frente de Todos en la Cámara Alta, el oficialismo se aseguraría 3 lugares y le dejaría sólo uno a Juntos por el Cambio, que adelantó que reclamará ante la Justicia.