El encuentro entre lo sagrado y el hombre

El reconocido actor y director Carlos Kanán está a cargo de la dirección de dos puestas en escena de “Vida y Pasión de Dios Hombre”, la tradicional obra que se presenta cada año en el escenario natural del predio Ojo de Agua, en el imponente paisaje de Tafí del Valle; y que ahora también podrá verse en el parque 9 de Julio.

La obra, que recorre momentos emblemáticos de la vida de Cristo, desde su nacimiento hasta la crucifixión y la resurrección, subió a escena ayer, y hoy repetirá a partir de las 16, con entrada libre y gratuita en Tafí. La misma “Vida y Pasión...” se verá hoy a las 21 y mañana a las 20, en el lago San Miguel del parque 9 de Julio. La entrada es libre y gratuita. La función se suspende en caso de lluvia intensa.

El mismo elenco

“En la Pasión en Tafí del Valle y en el lago del parque 9 de Julio se presenta el mismo elenco. Los protagonistas somos casi todos los mismos actores, por eso hacemos función en Tafí a las 16, bajamos y a la noche la hacemos en el lago”, le explica a LA GACETA Benjamín Tannuré Godward, quien personifica a Jesús, minutos antes del ensayo general en medio del viento tafinisto.

“Lo que varía entre una puesta y otra es que quienes representan los soldados a caballo son de una agrupación en Tafí y de otra en capital, así como quienes representan al pueblo”, agrega el protagonista esencial.

“Encarnar a Jesús en la Pasión es una experiencia muy fuerte, que demanda un gran esfuerzo físico y un gran esfuerzo espiritual”, declara. “Hay que poner mucho del oficio de la actuación para no dejarse llevar por las emociones del público, que ven los personajes que representamos. Eso es lo interesante: para ellos, nosotros somos realmente Jesús, María o Poncio Pilato, y se produce una comunión impresionante”, agrega.

Esta es la segunda vez que a Tannuré Godward le toca personificar a Jesús; antes hizo del apóstol Pedro. “Es una experiencia única, soñada por los actores -expresa-. Todos, en algún momento, deseamos un papel de esta dimensión en el teatro o en el cine, así que realmente es conmovedor lo que se experimenta, y sobre todo lo que el público devuelve”.

El actor concluye: “en definitiva, más allá de la religión de cada uno, y siendo esta una conmemoración religiosa cristiana, no deja de tratarse del encuentro entre lo sagrado y el hombre”.