13 Abril 2022
SE CONFUNDIÓ. Una mujer de 72 años se llevó a su casa una obra de arte.
En ocasiones, las grandes historias nacen de la sencillez de las acciones y en este caso una confusión fue la protagonista. En el Museo Picasso de París, se desarrolla una muestra de arte contemporáneo y en dichas instalaciones, una mujer de 72 años tomó una obra de arte pensando que era un saco olvidado. Además, la llevó al sastre para ajustarla porque le quedaba grande.
Dicho saco que colgaba de una percha sobre una de las paredes del museo era una obra del artista catalán Oriol Vilanova. Sin embargo, la mujer no percibió dicho objeto como una manifestación artística, por lo que cuando vio el abrigo decidió descolgarlo de su sitio para doblarlo, guardarlo en su cartera y retirarse sin que las cámaras, ni la seguridad se percate de dicho acto.
Este hecho sucedió el 7 de marzo, pero recién se dio a conocer en estos días. La “ladrona” regresó al museo semanas después del hurto, en el momento exacto en el que los investigadores acudieron para recabar pruebas. Esta vez, los guardias alertaron a los agentes de la presencia de la sospechosa y la detuvieron. Aunque, horas después, la fiscalía de París ordenó su libertad.
La gran curiosidad de este caso fue que el saco volvió a su lugar pero con 30 centímetros menos de tela, por lo que se cree que la mujer lo llevó a un sastre.
La obra en cuestión, titulada “Old Masters”, se hizo con el objetivo de lograr una mayor interacción con los visitantes, quienes podían tocarla, leer las postales que tenía en los bolsillos y debatir al respecto de la misma. Esta era la causa de su falta de protección, ni sistemas que impidieron su manipulación.
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