A un mes y medio del inicio de la guerra en Ucrania por la invasión de tropas rusas, el Kremlin reorganizó la cúpula militar y le puso una fecha límite a su objetivo.
El presidente de Rusia nombró al general Alexander Dvornikov, con experiencia en Siria, como líder de la cadena de mando para dirigir las tropas de ese país en territorio ucraniano, consignó el diario español El Mundo.
Además, ante la falta de resultados, el mandatario habría dado instrucciones específicas a la cúpula militar para que, antes del 9 de mayo, estén cumplidos los objetivos planteados antes de la invasión a Ucrania.
En esa fecha, en Moscú se conmemora la victoria en la Segunda Guerra Mundial, y Putin anhelaría poder celebrar un triunfo militar durante las celebraciones nacionales.
Mientras tanto, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, aseveró que su país está listo para una dura batalla con las fuerzas rusas que se acumulan en el este del territorio.
Las declaraciones del mandatario ucraniano se dieron luego de un ataque con misiles en la región occidental de Ucrania que, según las autoridades, mató a más de 50 civiles
"Sí, las fuerzas (rusas) se están reuniendo en el este (de Ucrania)", afirmó Zelensky en una conferencia de prensa conjunta con el canciller austriaco Karl Nehammer en Kiev.
“Esta será una batalla dura, creemos en esta lucha y en nuestra victoria. Estamos listos para luchar y buscar simultáneamente formas diplomáticas de poner fin a esta guerra”, advirtió el presidente ucraniano.
La invasión de Rusia, que comenzó el 24 de febrero, obligó a más de 4 millones de personas a huir al extranjero. Además, miles de personas murieron y sufrieron heridas como consecuencia de los ataques.
Las bajas civiles han desencadenado una ola de condena internacional, en particular por las muertes en la localidad de Bucha, localidad al noroeste de Kiev que hasta la semana pasada estaba ocupada por fuerzas rusas.
Rusia ha negado haber atacado a civiles en lo que llama una "operación especial" para desmilitarizar y "desnazificar" a su vecino del sur. Ucrania y las naciones occidentales han descartado esto, y lo han calificado como un pretexto sin fundamento para desatar la guerra. (Reuters-Especial)