La Justicia ordenó la prisión preventiva por 179 días para Lucas Emiliano Rojas (21 años) por el crimen del guardiacárcel Luis Ramón Cáceres (51 años) ocurrido el 28 de marzo en el barrio Imbaud de las Talitas. Se cree que Rojas condujo una de las motos en la que se movilizaban los delincuentes.
Según la acusación, ese día el efectivo junto a su hijo Enzo Cáceres (19 años) fueron en moto a un almacén de calle Benjamín Villafañe al 4.000. Mientras el padre realizaba compras, el hijo se quedó cuidando la motocicleta Honda XR cuando fue rodeado por cuatro ladrones que llegaron a bordo de dos motos: una Gilera de baja cilindrada y una Honda CG Titán.
La auxiliar Luz Becerra, de la fiscalía de Homicidios II que conduce Carlos Sale, planteó -con base en los dichos de los testigos- que Rojas conducía uno de los vehículos y Marcos Andrés Ruiz el otro. Y detalló que los cómplices que bajaron a ejecutar el asalto fueron Nicolás Adrián Yapura y Mauro Miguel Sandoval. Según la teoría fiscal, en primer momento ni Cáceres ni su hijo se resistieron al asalto, por lo que Yapura y Sandoval intentaron encender la moto que querían sustraer pero no lo lograron y comenzaron a ponerse nerviosos. En ese contexto, uno de los agresores levantó su arma e hirió a Enzo en el abdomen. Fue ese el momento en el que Luis Ramón Cáceres desenfundó su arma reglamentaria y realizó tres disparos con los que hirió a los ladrones. Desde el suelo, los delincuentes respondieron el fuego y le causaron la muerte al efectivo.
Uno de los testigos declaró que desde dentro del almacén escuchó al guardiacárcel decir “llévense todo” cuando los emboscaron. Minutos después empiezo a escuchar disparos, por lo que entendí que Luis había tenido que actuar para defenderse. Escuché al menos siete disparos, no pude más que cubrirme atrás de una heladera”, señaló el testigo (se leyó su declaración). En la escena del crimen se recogieron finalmente 9 vainas. Los motociclistas escaparon del lugar y Yapura y Sandoval fueron trasladados a un hospital, donde el primero falleció y el segundo se encuentra el grave estado.
A su turno, Rojas negó la acusación en su contra. Reconoció que había visto a Sandoval esa tarde y que habían fumado marihuana, pero dijo que volvió a casa antes de las 11. Luego Becerra pidió la imputación por homicidio en ocasión de robo y solicitó 179 días de preventiva para asegurar el proceso mientras se investiga el caso. La querella, asistida por el abogado Manuel Pedernera, compartió la solicitud pero sostuvo que se trató de un homicidio criminis causae. La defensora Silvia Furque, planteó que Rojas si anduvo en moto con Sandoval, pero en otro horario y en otra moto, por lo que podría haberse tratado de una confusión por parte de los testigos.
La jueza Juana Juárez finalmente resolvió dar lugar a la imputación y a la medida pedida por la Fiscalía y ordenó el traslado de Rojas al penal de Concepción.