Por Martín Soto
06 Abril 2022
CHUSTEK. Es abogado, tiene 52 años, y trabajaba como jefe de asesores de Vargas Aignasse. LA GACETA / FOTO DE ANTONIO FERRONI
La composición de la Legislatura de Tucumán sufrirá una nueva modificación en la sesión de mañana, convocada desde las 8.30. Como primer tema a tratar, la Cámara autorizará la licencia solicitada por el legislador Gerónimo Vargas Aignasse para desempeñarse como jefe Regional Norte Grande del Ente Nacional de Obras Hídricas y de Saneamiento (Enohsa). En consecuencia, dicha banca pasará a ser ocupada por Roberto Osiris Chustek, quien jurará y será puesto en funciones durante el debate.
La comisión de Poderes dio dictamen favorable para que asuma el sucesor de Vargas Aignasse tras estudiar un informe enviado por la Junta Electoral Provincial. Dicho organismo notificó que Chustek era quien seguía al legislador saliente en la nómina de candidatos por el acople “Nuevo Espacio Popular”, en los comicios de 2019.
En la previa de su asunción, Chustek dialogó con LA GACETA en su futuro despacho, lugar que conoce muy bien dado que se venía desempeñando como jefe de asesores de Vargas Aignasse. Allí comentó que también es abogado, que tiene 52 años, que vienen trabajando juntos hace más de dos décadas, que tiene un perfil bajo pero muy trabajador y que está empapado de los temas que se venían impulsando, por lo que su objetivo será buscar una suerte de continuidad.
En ese sentido, el también procurador adelantó que aspira a ocupar en la Cámara los mismos puestos que su antecesor; es decir, la presidente de las comisiones de Seguridad y de Medioambiente. “El hecho de haber sido jefe de asesores de Vargas Aignasse me permite ese conocimiento de los distintos temas que se venían planteando, vengo bien empapado. Eso me permite dar continuidad al trabajo que se venía desarrollando”, dijo.
Respecto a las expectativas con las que asumirá la banca, Chustek dijo que lo toma como un desafío para poder plasmar las inquietudes que viene trabajando el espacio, desde distintos roles. Mencionó, por ejemplo, que buscarán institucionalizar la iniciativa “Alerta Tucumán”, un programa de seguridad que ya impulsaron en algunos barrios de la capital. Agregó que otro objetivo es trabajar con las juventudes para brindarles un real espacio en las instituciones públicas.
“El desafío es entregarme por completo. El reemplazar a Gerónimo Vargas Aignasse no es nada sencillo, y no es mi intención copiarle su tarea ni mucho menos. Se busca la materialización de un trabajo colectivo desde distintos roles. Creo que es algo que estamos pudiendo plasmar a través de los compañeros que vamos accediendo a distintos cargos”, manifestó Chustek.
“No existe la conducción bicéfala”
En cuanto a la situación institucional de la provincia, el legislador por asumir destacó el momento que vive Tucumán y todo el Norte Grande con Juan Manzur a cargo de la Jefatura de Gabinete de la Nación, en sintonía con el gobernador interino Osvaldo Jaldo. “Es un momento histórico. Hay una decisión política del Gobierno nacional de apoyar fuertemente las obras en el NOA y el NEA, una zona abandonada por mucho tiempo por la política federal”, indicó. En cuanto a lo político, reconoció que aún hay heridas abiertas producto de la interna. “Sería falso decir que están totalmente zanjadas, pero creo que sí en un 90%. Se va trabajando para pulir todas esas asperezas que pueden haber quedado. La oportunidad histórica que tiene Tucumán y la región creo que no ha existido antes”, agregó.
Consultado sobre las tensiones públicas entre el presidente Alberto Fernández y su vice Cristina Kirchner, Chustek consideró que la sociedad reclama otro tipo de actitud. “Es un movimiento nacional justicialista, con distintos sectores, muchas veces encontrados. Eso no implica que esas disputas vayan en contra de la esencia política de nuestro partido, que es el beneficio para el pueblo. Es cierto que hay momentos de tensión, pero se debe ser respetuoso de la decisión popular. Se eligió un presidente y un proyecto político, pero de él se encarga una persona. No existe la conducción bicéfala. El peronismo es verticalista”, expresó.
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