Luego de haber transcurrido varios días desde el triste episodio protagonizado por las categorías M16 de Los Tarcos y Lince, la Unión de Rugby tomó cartas en el asunto imponiendo varias sanciones y comprometiéndose a revertir esta situación con el deporte.
En el documento se especifica que el Honorable Tribunal Inferior de Disciplina informó la suspensión de 46 jugadores por 80 días (desde el 26 de marzo hasta el 14 de junio del presente año), sumada a la pérdida de la condición de local por tres fechas para ambos clubes.
Vale recordar lo que retrató Maximiliano Pacheco, capitán de la M16 de los Tarcos, luego de lo sucedido. “La reflexión necesaria que estos hechos merecen, ya la comenzamos a realizar cuando los jugadores de ambos clubes compartimos el tercer tiempo, sentados en la misma mesa, pidiéndonos disculpas mutuas. Este deporte nos enseñó eso” aseguró, mostrando que el tenso clima parecía superado y que los jugadores tomaron conciencia sobre la gravedad de sus actos.
Asimismo, Julián Montenegro, el árbitro del encuentro, había comentado para LG Deportiva, que el verdadero reto para el deporte era concientizar al público que asiste a los encuentros, debido a que su gran hostilidad se impregna dentro del campo de juego, resultando como la protagonista de estos hechos lamentables.
Por esta razón, fue que la Unión de Rugby de Tucumán dio diversas recomendaciones a los clubes para evitar que estos tristes episodios se repitan.
El primero de los postulados dice: “no iniciar los partidos si los jugadores suplentes y entrenadores no se encuentran detrás de los ingoals”. Esto, debido a la participación de varios de los integrantes en estos hechos.
De la misma manera, se agregó: “se trataran de hacer gestiones para colocar cintas o sogas que delimiten la ubicación de espectadores y padres”. Acción que marcaría un verdadero precedente para el desarrollo del deporte en Tucumán.
Entre otras medidas, está el establecimiento de una edad determinada para ejercer de segundo lineman. Se estableció que será de 21 años, poniendo énfasis en que quien ocupe dicho rol debe tener “idoneidad para ejercer el cargo”.
Por último, y referido hacia el comportamiento del público, en el documento se planteó que se comenzarán a “dar charlas a los padres, entrenadores y jugadores, entendiendo que las virtudes de nuestro deporte deben ser mantenidas y conservadas en el tiempo a través de la concientización de todos los que participan de él”.