El cantante Ricardo Montaner manifestó su tristeza y dolor por el fallecimiento de Gerardo Rozín, quien falleció ayer a sus 51 años. La noticia conmovió a muchas figuras del mundo de la farándula, que se expresaron a través de sus redes sociales. Montaner fue un íntimo amigo de Rozín desde hace casi 20 años y le dedicó un sentido mensaje para despedirlo. Sus dos hijos, Mau y Ricky Montaner, también le dedicaron algunas palabras.
“Me pueden dar el pésame que lo voy a aceptar por derecho ganado. He sido amigo de un hombre increíble los últimos 17 años. El mejor entrevistador que tuve algún día y uno de los dedos de la mano que cuenta a los pocos amigos de verdad que tengo”, escribió el cantante en un posteo de Instagram junto a una foto de los dos juntos.
Además expresó, “al final tuvo razón, se iba a ir pronto. Tengo dolor y enojo, pero tengo también un profundo agradecimiento por todas las charlas que me dedicó y por todas las cuentas de los restaurantes que se apresuró a pagar. También agradezco su talento y el habernos elegido a todos los Montaner como sus parientes cercanos, su familia, el sitio a donde llegar sin aviso y con confianza. ‘El Tío’ Rozin, el de La Peña, se fue y nos dejó solos”, continúa el texto.
Por último, Montaner relató una conmovedora anécdota que pasaron juntos. Cuando Gerardo lo entrevistó, en medio de la charla, salió el tema de la religión. “Tengo guardada la última entrevista que me hizo en ION y que por ahora solo conservo. Le hablé de Dios porque era mi deber y aunque no me creía me supo escuchar con emoción y respeto a mi fe, a la fe que él decía no tener. De todos modos, estoy seguro que Dios en su infinita misericordia ya lo recibió allá arriba en la cima del cielo, donde deben llegar a descansar las buenas personas como ‘El Tío’ Rozín”, cierra.
Por su parte, los cantantes Mau y Ricky Montaner también construyeron un lazo de amistad y un fuerte vínculo con Rozín a lo largo de estos años. Ambos publicaron y expresaron en un posteo en Instagram, su tristeza ante la partida del presentador. “Una amistad improbable, pero tan real como de toda la vida. Vamos a extrañar cada carcajada juntos, tus recomendaciones de restaurantes que eran siempre los mejores y la batalla por pagar la cuenta que siempre ganabas”, comienza el texto.
Y cierra: “los consejos, las puteadas, las ocurrencias. Agradecidos con Dios por habernos cruzado en el camino. Espéranos sentado en la mesa del cielo, nosotros llegamos tarde… como de costumbre. Ah, y cada vez que cantemos ‘Dolería’ te recordaremos… es tu preferida”.