La Organización Mundial de la Salud confirmó la existencia de una nueva cepa de covid-19 detectada en Europa, y que es producto de una mutación que incluye dos variantes con circulación comunitaria a nivel global: delta y ómicron.
En principio, de forma coloquial, se la bautizó como "deltacron", aunque por el momento sus características y alcances están siendo objetivo de estudio por parte de los expertos.
“Tenemos conocimiento de esta recombinación. Es una combinación de Delta AY.4 y Ómicron BA.1. Se ha detectado en Francia, Países Bajos y Dinamarca, pero a niveles muy bajos”, indicó Maria Van Kerkhove, epidemióloga líder de la OMS, en una rueda de prensa ofrecida en Ginebra. La especialista, según consigna un informe de Infobae, aclaró que “esta recombinación era de esperar”, por lo que no se mostró sorprendida por esta nueva cepa.
Inclusive, advirtió que, por ahora, no se ha detectado “ningún cambio en la epidemiología ni en la gravedad” de los cuadros de covid-19 generados por esta variante. “Pero hay muchos estudios en marcha”, detalló Van Kerkhove.
Un estudio publicado esta semana por el Instituto Pasteur, en Francia, encontró las primeras pruebas sólidas de la existencia de esta variante recombinante, que fue identificada en varias regiones de Francia y estuvo circulando en ese país desde principios de enero de 2022. También se identificaron genomas virales con un perfil similar en Dinamarca y Países Bajos.
En un primer momento, la OMS había indicado que "deltacron" podía tratarse no de una nueva cepa, sino de una "contaminación" registrada durante el proceso de secuenciación en los laboratorios.
"Lo que creemos es que es el resultado de una contaminación que ha ocurrido durante el proceso de secuenciación. Dicho esto, uno puede infectarse con diferentes cepas de SARS-CoV-2. Lo que pueda hacer para minimizar su exposición tanto al SARS-CoV-2 como a la gripe, le beneficiará”, había manifestado días atrás Van Kerkhove.
Ahora, luego de la última gran ola de contagios causada por Ómicron en todo el planeta, el esfuerzo de los expertos está en determinar qué impacto puede tener esta mutación.
Al margen de esta nueva variante, el director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, mostró su preocupación días atrás porque “varios países están reduciendo drásticamente las pruebas” diagnósticas sobre la covid-19.