"Lo que ocurrió no es producto de la falta de limpieza de los canales (que de verdad, es necesaria). Tampoco pasó porque algún vecino haya dejado sus bolsas de basura afuera (que también es frecuente). Lo que ha sucedido se debe, en realidad, a la falta de obras de desagües pluviales". Ese concepto se oye en boca del ingeniero en hidráulica Hugo Roger Paz, quien en 2007 elaboró para la Dirección Provincial del Agua (DPA) los proyectos de reconstrucción del canal Yerba Buena y de construcción del canal La Rinconada. Quince años han transcurrido. Las obras no se han hecho. "Y los problemas que se pretendían mitigar no solo no se han solucionado, si no que han empeorado", advierte el docente de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) y magister en ingeniería hidráulica de la Universidad de Cantabria, en España.
“El canal Yerba Buena afronta un colapso estructural”. Hugo Roger Paz.
"Tampoco podemos disculparnos diciendo que cayeron 120 milímetros en una hora y media. Cada vez más, tendremos lluvias fuertes", añade. Desde la mirada de este especialista, tan dramático es el estado de los canales, que insta a los gobernantes a erradicar el famoso concepto del 'plan pre-lluvia'. "Eso no tiene entidad. Las obras no se pueden realizar en un par de meses. Sin acciones concretas, la destrucción que hemos visto este fin de semana frente al colegio Pucará volveremos a verla ante cada tormenta intensa", ejemplifica.
El canal Yerba Buena -que es el que pasa por enfrente del Pucará y de numerosos barrios y countries- afronta dos inconvenientes graves, explica el ingeniero: la falta de capacidad para conducir los caudales que recibe y el estado de colapso en el que queda después de cada aguacero inusitado. En consecuencia, se deben introducir modificaciones a fin de aumentar su capacidad y de corregir el deterioro.
Llegado este punto, el experto plantea, además, el drama del canal Sur, que presenta un déficit de conducción en casi toda su longitud. Esto se debe -básicamente- a un cambio en el uso del suelo piedemontano, que primero sustituyó los bosques nativos por cultivos y después esas fincas por viviendas. Sus cuencas de aporte son el río Muerto, las quebradas que bajan de las sierras de San Javier y los arroyos y ríos Tafí, Caínzo, Las Piedras y Nueva Esperanza.
Como no se puede ampliar el canal Sur porque se encuentra restringido por la infraestructura que lo circunda, queda una sola alternativa: disminuir los caudales que llegan hasta ahí, explica Paz. Y en este punto, la historia regresa al canal Yerba Buena. ¿Qué pasaría si las aguas que bajan del río Muerto a través de este conducto y que luego son descargadas en el canal Sur fuesen enviadas a otra parte? Indudablemente, el escenario sería diferente.
Por ello, en aquel entonces propuso para la DPA la construcción de un canal de 6,5 kilómetros de longitud, que se llamaría La Rinconada y descargaría en el arroyo El Manantial. Así las cosas, el canal Yerba Buena quedaría únicamente para conducir las aguas urbanas. Todas las aguas del cerro San Javier serían desviadas hacia la localidad vecina. La traza del canal La Rinconada debería iniciar unos 800 metros más abajo del country Los Azahares. Sin embargo, desde que aquella propuesta suya -a la que la DPA calificó de prioritaria en 2020- hasta ahora han pasado algunos años y ciertos sectores se encuentran ocupados por barrios cerrados y propiedades. "Se debería, al menos, haber enviado un proyecto de ley a la Legislatura para que se haga una restricción de dominio", lamenta Paz.
Tras las tormentas del sábado por la noche y madrugada del domingo últimos, el tramo del canal Yerba Buena que pasa frente al colegio Pucará quedó afectado por socavamientos. Paz teme que eso desencadene una situación similar a la que se afecta actualmente al canal Caínzo. Desde 2020, en este diario se han publicado artículos sobre la situación de ese canal, que corre paralelo al camino que conduce a los barrios privados Alto Verde. Vecinos y especialistas coinciden en que el riesgo es preocupante debido a que los taludes se encuentran socavados.
El proyecto de reconstrucción del canal Yerba Buena fue dividido por la DPA en etapas y en los últimos dos años se ejecutó un tramo, frente al country Las Yungas. Pero los alrededores del colegio Pucará, de los countries Los Azahares, Las Jarillas y VeraTerra y de la calle Las Garzas también podrían entrañar riesgos para los pobladores, concluye Paz.