En el séptimo día de la invasión militar a Ucrania, la agencia atómica de la ONU confirmó que Rusia tomó el control de la planta de energía nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa.
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), con sede en Viena, indicó que Rusia le informó por carta de su avance militar sobre esta central, ubicada en el sureste de Ucrania.
Rusia comunicó que el personal de la planta continuaba su "trabajo para proporcionar seguridad nuclear y monitorear la radiación en el modo normal de operación", según informó el OIEA a la agencia de noticias Europa Press.
La de Zaporiyia es la central nuclear más grande de Europa, con seis de los 15 reactores de Ucrania.
En este contexto, el director general del organismo mundial de control nuclear, el argentino Rafael Grossi, advirtió hoy del peligro que representan los combates en Ucrania cerca de instalaciones atómicas, luego de que tropas rusas rodearan en el país la central más grande de Europa.
Grossi dijo también que Ucrania no está desarrollando armas nucleares, como dijo temer Rusia.
En una intervención durante una reunión especial de la Junta de Gobernadores del OIEA, el director general dijo que estaba "gravemente preocupado por la situación" en Ucrania.
Según un resumen de su intervención suministrado por el OIEA, Grossi dijo que es "la primera vez que un conflicto militar está sucediendo en medio de instalaciones de un programa nuclear vasto y establecido", informó la agencia de noticias Europa Press.
El diplomático argentino destacó que cualquier acción que ponga en riesgo la operación segura de instalaciones nucleares o el resguardo de material radiactivo "podría tener consecuencias severas, agravar el sufrimiento humano y causar daño medioambiental".