La invasión rusa en Ucrania causó la muerte de 17 nenes.
Entre las víctimas identificadas, se encuentra Alisa Hlans, una chica que dentro de tres meses hubiera cumplido ocho años. Murió en el ataque con misil al jardín de infantes de Okhtyrka, localidad que se encuentra a 6 horas de auto al este de esta capital, ocurrido el viernes pasado, segundo día de la invasión. Gravemente herida junto a otras personas, la niña fue llevada al hospital, donde murió el sábado, como informó la procuradora general de Ucrania, Irina Venediktova, con un mensaje en Facebook que acompañó con un grito: “necesitamos paz”.
Según confirmó la fiscal general Irina Venediktova, Alisa y otras cinco personas murieron luego de los ataques en el establecimiento educativo. Además, mencionó que otros nenes resultaron heridos por los disparos.
Otras muertes
Mientras el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski busca llegar a un consenso con Vladimir Putin, las tropas rusas siguen avanzando en las ciudades ucranianas. Durante su paso, mataron a al menos 16 nenes, entre ellos Polina y Sofía Fedko, que buscaban escapar de su país al momento de su muerte.
Sofía, que viajaba junto a su madre, su hermano y sus abuelos en un auto, intentaba salir de Ucrania cuando a las afueras de la ciudad de Kherson fueron interceptados por los soldados rusos. A pesar de que su madre gritaba que “había niños en el auto”, todos murieron.
La BBC confirmó, mediante la palabra de Irina Venediktova, la muerte de Polina, una nena que estaba en el último año de la escuela primaria en Kiev. La pequeña fue asesinada junto a sus padres mientras transitaba por la calles de la capital ucraniana.
También murió un chico, aún sin identificar, que andaba en bicicleta en la localidad de Chuhuiv, en la regional oriental de Kharkiv, a raíz de un golpe de mortero o un misil lanzado por fuerzas rusas, cerca de la frontera.
En tanto el, 25 de febrero pasado en Gorlovka, en el sureste, también cerca de la frontera con Rusia, dos maestros murieron debido a un misil que destruyó una escuela, según Save The Children. “Estamos al quinto día de una guerra sangrienta, inhumana y cruel”, dijo Sviatoslav Shevchuk, arzobispo de Kiev, al denunciar a quien usa a mujeres y niños como escudos humanos.