Avanco cumple 30 años y lo celebra haciendo lo que mejor sabe hacer: avanzar y construir

Bastante conocida es la evocación reflexiva y emotiva que el Ingeniero Rubén Rojkés, CEO y socio fundador de Avanco, hace de su padre en el contexto que dio inicio a la Compañía, allá por el año 1992: “trabajaba con mi padre en un negocio textil que él tenía en la calle 24 de Septiembre. Esa experiencia fue para mi el mejor MBA que podría haber hecho. Yo venía, recién recibido, de una ciencia dura como la ingeniería. Fue allí, empujando codo a codo el negocio familiar, donde entendí la lógica de lo comercial, la importancia de comprender las necesidades de un cliente y construir confianza en alguien que decide comprarte o volver a comprarte, la tenacidad y creatividad que tenés que tener para escalar un negocio, etc.”

Seguramente está allí el germen de una empresa que al cabo de treinta años se siente orgullosa no sólo de ser protagonista del desarrollo urbanístico de Tucumán, sino también de poseer una mística propia. Frases como “hacemos countries o edificios donde viviríamos nosotros. De lo contrario, no los hacemos” forman parte del ADN de Avanco y están grabadas a fuego tanto en su fundador y sus tres hijos, que ya trabajan en la empresa, como en todos y cada uno de sus cuadros profesionales.

Pero en Argentina, más aún en Tucumán, toda empresa constructora o desarrollista que se precie de tal y pretenda consolidarse en el tiempo construyendo una marca confiable, debe tener mucho más que mística. Debe tener capacidad para planificar y tomar decisiones estratégicas. En el caso de Avanco, como pocos players del sector, la decisión central de carácter estratégico es “jugar en toda la cancha”. Tanto a nivel de productos como de segmentos de clientes.

La Empresa tiene un muy ganado prestigio por su experiencia en la construcción de edificios. Es más que suficiente revisar el listado de construcciones concretadas en este segmento para asegurar que la diversidad de productos está asegurada, desde el monoambiente que generalmente demandan los inversores hasta el departamento Premium de tres dormitorios, con dependencias de servicios y amenities exclusivos.

Asimismo, en la última década llegó el turno de la diversificación: Avanco incursionó en el segmento de las urbanizaciones privadas de tipo country. Primero con The Point Country y recientemente con Cantares Country Urbano.

A este menú tan variado de productos se le suma otro factor clave de éxito, tan estratégico como el anterior pero en este caso relacionado con los procesos productivos, operativos y de servicio que hacen posible, en definitiva, que una persona en Tucumán concrete una inversión inmobiliaria. El Ingeniero Rojkés lo explica de esta manera: “nosotros decidimos estar en todas las etapas del negocio. Desde el diseño hasta la comercialización e incluso la financiación de las ventas que hacemos. No sólo por una cuestión de interés comercial, sino porque también nos permite garantizar que todo lo que un cliente reciba, sea un producto o un servicio, tenga el mismo estilo, la misma filosofía y la misma calidad”. Y completa diciendo: “integrar buenos equipos de trabajo para sostener esa ventaja competitiva nos llevó años y en realidad es una tarea que nunca termina. Soy un convencido de que a las empresas las hacen las personas y en Avanco las personas han sido y son fundamentales. Hoy tengo el honor de poder decir que muchos de mis colaboradores principales me acompañan desde hace años. Algunos, como la arquitecta Viviana Perosa, desde el primer día”.

Por otra parte, toda empresa desarrollista tiene su propia estrategia de producto. ¿Cómo vive Avanco este aspecto del negocio? “El principal pilar de nuestra estrategia de producto es que conocemos muy bien la lógica de una buena inversión inmobiliaria” afirma el Ingeniero Rojkés. “Nuestros clientes lo saben y lo valoran. Buenas ubicaciones, excelente calidad constructiva que asegure la perdurabilidad del producto, una arquitectura de vanguardia que realmente le dé una personalidad y el respaldo total de Avanco en cada emprendimiento, en cada operación. Esto último es fundamental, nosotros respaldamos con nuestro patrimonio todos y cada uno de los desarrollos que hacemos, lo cual queda formalizado en los instrumentos legales y administrativos. Vivimos en un país donde la inversión inmobiliaria siempre fue y seguirá siendo un buen destino para resguardar ahorros. Por eso, para quien compra una propiedad es importantísimo tener la tranquilidad de que detrás de esa operación hay una empresa seria, que cumple con todo lo prometido. Avanco es una excelente opción en ese sentido y los resultados están a la vista: desde hace años nos siguen muchas personas que buscan, en la compra de inmuebles, hacerse una cartera de rentas”.

Ampliando su visión estratégica de producto, el Ingeniero Rojkés agrega:

“Avanco es una empresa en constante dinámica. Nos apasiona la tarea de diseñar, de darle forma al producto que ofreceremos. Para eso estamos muy atentos a las tendencias y necesidades que muestra el mercado y la sociedad tucumana. Nosotros diseñamos y construimos para Tucumán porque amamos esta provincia. También tenemos muy en claro que el metro cuadrado a construir nunca es un comodity, jamás. Cada lugar tiene su particularidad, su impronta, su diseño, su jerarquía, su zona. Otro factor clave es que tratamos de adaptar y aplicar ideas y formatos que son exitosos y de alta calidad en las principales ciudades del mundo. Viajamos mucho con la vista puesta en ese objetivo: ver, analizar, comparar e intentar adaptar. En el mismo sentido, trabajamos fuerte en la definición de buenos amenities. Desde los espacios verdes, recreativos y deportivos, hasta los sociales y de trabajo. Por ejemplo, hoy todos los desarrollos tienen coworking”.

Así es Avanco. Así es su historia y su presente. Pero en toda buena historia, siempre hay algo más. Siempre hay un motivo que no lo explica ninguna estadística, ningún resultado tangible. “Al cabo de treinta años, estoy seguro que todo fue posible gracias a que teníamos un sueño que abrazábamos con pasión: diseñar proyectos y construirlos, poner en movimiento ideas que modifican un espacio. Generar algo allí donde antes no había nada. Ver cómo eso que generamos le mejora la calidad de vida a las personas. Esa sensación es indescriptible, realmente nos moviliza y nos genera tanto compromiso hoy como el primer día”, afirma el Ingeniero Rojkés, cerrando esta nota con una emoción inocultable.

Si hace treinta años un ingeniero entusiasta decidía el nombre de Avanco gracias a la inspiración publicitaria de combinar las palabras “avanzar” y “construir”, lo que vino después pareciera confirmar que esa simple combinación de vocablos terminó siendo, también, la mejor síntesis de su propia historia y de su razón de ser. Pues han sido treinta años de avanzar y construir, avanzar y construir, avanzar y construir.

Avanco brinda asesoramiento personalizado en sus oficinas de Av. Salta 565, San Miguel de Tucumán.

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