El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, agradeció el apoyo internacional recibido en las últimas horas a la propuesta de desconectar a Rusia de la "civilización financiera global", a modo de represalia por la decisión de avanzar con una invasión armada sobre ese país.
Un funcionario de la presidencia francesa dijo el sábado que los miembros de la Unión Europea estaban cerca de acordar excluir a Rusia del sistema de pago internacional SWIFT, destacó la agencia Reuters.
Esta medida implicaría un duro golpe para el presidente Vladimir Putin, aunque también podría significar el inicio de una escalada de acciones entre Rusia y las potencias de Occidente.
Por el momento Zelensky valoró los contactos que mantuvo en las últimas horas con mandatarios de otras naciones.
"Nuestros diplomáticos lucharon día y noche para inspirar a todos los países europeos a acordar una decisión fuerte y justa para desconectar a Rusia de la red interbancaria internacional. También tenemos esta victoria", aseveró el presidente de Ucrania.
Además, anticipó que el impacto serían "miles y miles de millones de pérdidas para Rusia, un precio tangible por esta vil invasión de nuestro país". "Ucrania ganó la atención de todo el mundo civilizado. ¿Y el resultado práctico? Aquí está: SWIFT... civilización financiera", añadió Zelensky.
También dio la bienvenida a las propuestas de Turquía y Azerbaiyán para celebrar conversaciones de paz con Rusia, y destacó su diálogo con el primer ministro de Italia, Mario Draghi, como clave para acordar más apoyo internacional a Ucrania.
¿Qué implicaría la exclusión del SWIFT?
Sacar a Rusia de Swift haría casi imposible que las instituciones financieras envíen dólares dentro o fuera del país presidido por Putin, lo que supondría un repentino impacto para las empresas rusas y sus clientes extranjeros; en especial, los compradores de exportaciones de petróleo y de gas.
Los países de la UE estaban divididos sobre si dar o no ese paso. Un alto diplomático de la UE había admitido a la CNN que era probable que los intereses económicos ganaran la discusión y que Bruselas no eliminara a Rusia de este sistema que desde 1973 es la base del sistema financiero global: lo usan 11.000 bancos en 200 países o territorios para poder hacer transferencias.
La llamada entre Zelensky y Draghi resultó clave a último momento. "Este es el comienzo de una nueva página en la historia de nuestros estados, Ucrania e Italia", habían celebrado el mandatario ucraniano.
De esta forma, ahora solamente Alemania, Hungría y Chipre se oponen a infligir el máximo golpe financiero a Moscú.
Swift tiene su sede en Bélgica y está gobernada por una junta compuesta por 25 personas, incluido Eddie Astanin, presidente de la junta directiva del Centro de Compensación de Contraparte Central de Rusia. Swift, que se autodescribe como una utilidad neutral, está incorporada bajo la ley belga y debe cumplir con las regulaciones de la UE. Excluir a Rusia de este sistema ha sido bautizado como "opción nuclear", debido a las terribles consecuencias que podría tener para la economía rusa y para el valor de su moneda. La medida haría que la economía rusa se contrajera un 5%, según cálculos del ex ministro de finanzas ruso Alexei Kudrin. Otros análisis creen que la caída podría ser incluso mayor.