Por Gustavo Rodríguez
26 Febrero 2022
OBJETIVO CUMPLIDO. Un policía revisa el auto que habrían utilizado los sospechosos para cometer ilícitos.
La mujer que había sufrido un robo, episodio que derivó en un enfrentamiento en plena avenida Perón, dejó todo aclarado. Confirmó que el audio que viralizó un comerciante de Yerba Buena, el mismo que no quiso realizar una denuncia ni colaborar en la investigación, era falso. Ahora tratan de determinar si corresponde que se le impute algún delito por haber difundido esa información falsa que generó conmoción en esa ciudad.
El hecho se conoció a través de la viralización de un audio que grabó un comerciante. En el mensaje contaba que jóvenes que se movilizaban en un Peugeot 307 habían robado un bolso de un automóvil que estaba estacionado y en el que tres niños aguardaban a su madre. El hombre siguió a los delincuentes hasta la avenida Perón, donde se topó con un móvil policial que se hizo cargo de la persecución. En el trayecto, los policías dispararon con armas antitumultos para obligar a los sospechosos a detenerse, pero no pudieron hacerlo y terminaron escapándose.
El fiscal Diego López Ávila actuó de oficio y, al no haber podido encontrar a la víctima, pidió que se buscara al vehículo que habían utilizado los acusados y que se tratara de identificar al autor del mensaje. Personal de la Brigada de Investigaciones de Yerba Buena, al mando del comisario Ricardo Marchant, identificó al propietario del Peugeot, que tendría antecedentes por delitos contra la propiedad, y secuestraron el auto. Los policías también dieron con la persona que divulgó el audio, aunque igual no quiso colaborar.
López Ávila, ante la falta de evidencias para imputarles el delito de robo a los sospechosos, pidió a la comunidad que aportara datos para encontrar a la víctima. Al día siguiente de haberlo hecho, recibió dos denuncias de otras personas que sufrieron robos en Yerba Buena y en la capital contra los sospechosos. Pero el misterio continuó hasta el jueves a la tarde, cuando la mujer “más buscada” de la provincia se presentó en la comisaría de Yerba Buena.
La víctima, docente de 39 años, en la dependencia policial relató que el martes había dejado estacionada su camioneta Honda HRV sin seguro sobre calle Moreno entre Bolivia y Pedro de Villalba, para hacer unas compras. A los pocos minutos regresó y se dio cuenta de que desconocidos, sin ejercer ningún tipo de violencia, le habían abierto la puerta y le habían robado un bolso verde donde tenía objetos de aseo de su bebé, entre otras pertenencias. Confirmó además que, tras darse cuenta del delito que había sufrido, un guardia de una agencia de seguridad le entregó parte de lo que le habían robado.
Diferencia
“Andan cuatro personas en el auto, le abrieron la puerta del auto a la señora y le sacaron el bolso que tenía adentro y donde estaban cuatro criaturas”, grabó el comerciante en el audio. Después indicó que se inició una persecución que terminó en el tiroteo.
El fiscal López Ávila consideró que a la hora de emitir estos tipos de mensajes hay que ser muy cautos. “Dar la alerta de que una persona está armada y que son peligrosos predispone a los policías a actuar de una manera diferente. En esta situación, los efectivos actuaron correctamente, pero qué hubiera pasado si los uniformados veían que los sospechosos realizaban un movimiento extraño y disparaban con sus armas reglamentarias. Iban a poner en peligro la vida de hasta terceros”, afirmó. “También entiendo por qué el autor del mensaje no quiso colaborar con nosotros”, añadió.
En 2020, el gobernador Juan Manzur promulgó una norma en la que se sancionaba a las personas que se encargaban de difundir noticias falsas. “Serán sancionados con penas de multa equivalentes a un salario mínimo, vital y móvil (SMVM) y con los días de arresto que determine el juez contravencional, los que no podrán ser superiores a 10 días, a quienes difundieren, propagaren o divulgaren por redes sociales noticias que resulten total o parcialmente falsas, siempre que el hecho no constituya delito y sin perjuicio de la responsabilidad civil o penal que pudiera corresponderle”, indica el artículo 56 de la Ley 9.120. Advierte que “en todos los casos, se deberá garantizar el derecho a la defensa y el debido proceso”.
Los vecinos de Yerba Buena, más allá de lo que digan las leyes, dieron su veredicto. “Mentir una cosa así es muy malo. En este caso la situación es mucho peor porque el hombre no sólo exageró, sino que no quiso colaborar con la Justicia, y ahora sabemos por qué se negó a hacerlo”, indicó Lourdes Terranova.
Después de haber escuchado atentamente a su amiga, Soledad Herrera agregó: “la gente tiene que entender que las redes sociales mal manejadas son un peligro. En este caso, generó alarma al vicio. No hubo ninguna amenaza a chicos ni cosas por el estilo. En los tiempos tan difíciles que se viven no se puede decir mentiras porque eso altera más a los ciudadanos. Es muy feo todo lo que sucedió”.
“Estamos cansados de ver estas cosas en las redes sociales. La gente tiene que tener más cuidado. Al lío hay que hacerlo en las comisarías, en los tribunales, pero no en lugares donde la gente puede llegar a confundirse y tomar malas decisiones”, advirtió Hugo Gramajo.
Las claves del caso
El martes se viralizó en Yerba Buena un audio en el que se daba cuenta de un grave robo que habría sufrido una mujer en esa ciudad.
Los investigadores identificaron a los sospechosos y al autor del mensaje, que no quiso denunciar el caso ni colaborar con la pesquisa.
La víctima se presentó en la Policía y contó lo que había sucedido. Otras personas denunciaron delitos que habrían cometido los sospechosos.
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