“El involucramiento de las fuerzas de seguridad como parte activa de hechos delictivos es un fenómeno existente desde que Argentina existe como tal y una deuda pendiente e irrenunciable de la sociedad y de la Justicia”, señaló el juez Mario Velázquez después de haber dado a conocer la resolución que dictó en contra de los tres efectivos.
El magistrado aclaró que consideró prudente realizar estas manifestaciones al tener sentados en el banquillo de los acusados a tres efectivos de la fuerza y se sospecha que habría otro dos uniformados y después de haber firmado la autorización para que se allanaran dos dependencias policiales.
Velázquez agregó: “el Poder Judicial no debe ni puede quedar impasible ante tan flagrante violación de derechos por parte de individuos que forman parte del mismo Estado, y que son su brazo monopólico de la fuerza. Los excesos policiales, luego de las lecciones que nos dio la historia, no pueden ser permitidos ni tolerados, ni por el Estado ni por la sociedad; sino que, por el contrario, resulta imperiosa su investigación y juzgamiento, garantizando a los acusados, el pleno goce y ejercicio de todos los derechos que, como imputados, le asisten”.
“La única y primordial razón de ser del PJ, en el diseño originario de Montesquieu, es servir de coto a los desbordes del Estado y los ciudadanos, sirviendo como garante de los derechos fundamentales de los ciudadanos, mediante individuos revestidos de jurisdicción, cuya actuación debe ser independiente, autónoma, imparcial e impartial”, razonó el juez.
Velázquez acabó su intervención con estas palabras: “todos los operadores del servicio de Justicia debemos esforzarnos para que este tipo de situaciones tengan para la sociedad tucumana el esclarecimiento en tiempo y forma del hecho aquí investigado”.