A menos de una semana de la Apertura del 117° Periodo de Sesiones Ordinarias, en la Legislatura preparan lo que será una ceremonia rociada de particularidades. En primer lugar, porque luego de seis años de ser anfitrión el vicegobernador Osvaldo Jaldo estará a cargo del discurso por ser cabeza interina del Poder Ejecutivo. Y, en consecuencia, el presidente subrogante de la Cámara, Sergio Mansilla, será quien abra las puertas y reciba en el palacio espejado a las máximas autoridades de los tres Poderes de Estado.
Otra singularidad importante será la ausencia de movilizaciones, banderas y cotillón en las adyacencias de la Legislatura. A pesar de la euforia que representa entre los “jaldistas puros” que el tranqueño brinde su primer discurso con la banda y el bastón de mando, el propio Jaldo viene marcando desde hace días que “no vamos a hacer ningún tipo de movilización” porque la pandemia no pasó. Y lo ratificó ayer con LA GACETA: “el 1 de marzo la movilización es cero”.
En igual sentido se expresó el secretario de la Legislatura, Claudio Pérez: “iría en contra de todo lo predicado y practicado en la pandemia”. La principal autoridad administrativa de la Cámara indicó que la sesión del 1 de marzo comenzará a las 9 y que ingresarán al recinto: el gobernador interino; el presidente subrogante; los ministros del Ejecutivo; los vocales de la Corte Suprema; los titulares de los ministerios de Defensa y Fiscal; autoridades del Tribunal de Cuentas; legisladores; intendentes; y presidentes de los Concejos Deliberantes. Además, dijo que el hall de la planta baja se ubicará a los 93 delegados comunales.
La comisión externa de legisladores aguardará por Jaldo en el Teatro San Martín. De caminarán pocos metros a la Legislatura, donde será escoltado por la comisión interna.
El tránsito será cortado en la zona.
El mandatario buscaría con su discurso marcar su impronta de gestión, fijando las políticas públicas que desarrollarán hacia adelante. Además, se hará un repaso de lo realizado hasta aquí y de los convenios firmados con la Nación.
En cuanto al año legislativo que se viene, Mansilla analiza convocar a una sesión para el 10 de marzo para dar celeridad a iniciativas solicitadas por el Ejecutivo, como el Consenso Fiscal o lo vinculado a obra pública, y otras de los parlamentarios, especialmente a aquellas que tengan impacto social. A su vez, dijo que hay otros proyectos complejos y complementarios que se vienen charlando con los parlamentarios desde 2021, los cuales requerirán un tratamiento legislativo profundo y respetuoso antes de llegar al recinto. Entre ellos, mencionó la reforma del Código Procesal Civil y la Ley de Comunas Rurales.
Respecto a la última, Pérez marcó que la Legislatura ya articuló algunos retoques en la pasada sesión, para dar operatividad mínima a las comunas. A su vez, mencionó que reestructurar la Ley N°7.350 -algo que propone el legislador oficialista Carlos Gómez y también reclama la oposición- demandará un análisis mucho más profundo, de manera integral. “Estoy convencido de que se tratará este año, en algunos meses, porque son leyes que hay que tratarlas con un respeto especial”, señaló el funcionario legislativo.