Vivimos en un mundo en el que constantemente los porcentajes de sobrepeso y obesidad aumentan. Con la obesidad mórbida (que afecta a un 6% de la población argentina) aparecen una serie de complicaciones que dificultan la calidad de vida del paciente. ¿La alternativa para salvar y cambiar vidas? La cirugía bariátrica o metabólica.
Y sobre esto se hablara en los próximas días en Tucumán. La provincia fue elegida sede del quinto Congreso Nacional de la SACO (Sociedad Argentina de Cirugía de la Obesidad) y Congreso Latinoamericano de Cirugía Bariátrica y Metabólica. Previo al evento, LA GACETA dialogó con el doctor Felipe Eduardo Fiolo, presidente del congreso y director ejecutivo de la SACO.
-¿Hablamos de cirugía bariátrica o metabólica?
- Hoy se habla más de cirugía metabólica porque la obesidad es, en definitiva, una enfermedad metabólica. Cirugía bariatrica quiere decir cirugía del peso, y con el tiempo aprendimos que se trata de algo más amplio: la cirugía metabólica es la resolución no sólo del peso, sino todo lo que lo acompaña.
- ¿Qué es la cirugía metabólica?
- Consiste en generarle una herramienta al paciente y enseñarle como se usa. La cirugía tiene dos objetivos: 1) la restricción, es decir, lograr saciedad comiendo menos, y 2) generar cambios fisiológicos en el tránsito del alimento a través del intestino; estos cambios favorecen al estímulo de secreción de distintas hormonas intestinales y, por ende, hacen que sea más fácil corregir algunas enfermedades como la insulino dependencia, el síndrome metabólico o la diabetes misma.
- ¿La obesidad en Argentina sigue en aumento?
- Sigue creciendo. Es una enfermedad que año a año afecta a un sinnumero de pacientes. En nuestro país la población con obesidad es de alrededor un 35%. Y con obesidad mórbida, que es cuando la enfermedad es claramente una enfermedad y afecta el estado de salud del paciente, hablamos de un 6% de la población. La cantidad de gente que está afectada por esta patología es significativa. Estamos frente a una enfermedad que se ha transformado también en una pandemia. Afecta casi por igual a todo el mundo y nosotros no estamos exentos.
- Se habla mucho a nivel mediático y en redes sobre la intervención quirúrgica...
- Es verdad que se está conociendo mas acerca de la operación quirúrgica para la obesidad, pero no es un tema simplemente mediático, porque haya propaganda a favor de la cirugía, sino que hay consensos y argumentos, y bibliografía que avalan claramente los beneficios que tiene el tratamiento quirúrgico, que es interdisciplinario. La cirugía es un componente o un participante más de todo esto en el tratamiento de esta patología.
- ¿Por qué?
- Porque un paciente obeso no es un paciente que simplemente está afectado por el volumen corporal, sino por todo lo que ocurre secundario a eso, desde el punto de vista de su salud y enfocado a problemas cardiovasculares, cerebrales, de diabetes o metabólicos. Vale decir que es una enfermedad muy compleja que daña significativamente a los pacientes y que, lamentablemente los métodos conservadores para tratarlos, basado fundamentalmente en la actividad física y dietas, tienen un alto porcentaje de fracasos.
- Hay gente que tras la cirugía y regana peso con el tiempo.
- Por eso el equipo que trata la patología somos un elemento más. Los equipos interdisciplinarios del tratamiento quirúrgico de la obesidad, están compuesto no sólo por los cirujanos. Hay nutricionistas, médicos nutriologos, endocrinológos, psicólogos y psiquiatras, ademas de profesores de educación física, terapistas y demás. A la obesidad se llega por distintas causas: emocionales, dietéticas... Lo que hace la cirugía es, de alguna manera, brindarle al paciente una herramienta que lo ayude, acompañado de los otros actores del tratamiento, para poder hacer ciertos cambios de conducta.
- ¿Es un abordaje interdisciplinario?
- La intervención nuestra es tan importante como la del psicólogo o la del nutricionista. Es decir: podés re-ganar peso en la medida que no te adhieras a los consejos que te vamos a dar. Lo que el paciente tiene que entender es que el éxito o fracaso de la cirugía va a depender en gran medida de su comportamiento, y de buscar la forma de no “pelearse” con la cirugía.
- Hay movimientos contra la gordofobia y algunos niegan la obesidad como enfermedad.- ¿Todas estas cuestiones dificultan la disminución de la obesidad en el mundo?
- Es probable. Estos movimientos, estas corrientes, tienen la visión de que el paciente con obesidad no tiene que ser discriminado. Y estoy absolutamente de acuerdo con ello: el paciente, con su obesidad, es tan valioso como una persona delgada. Pero ese valor está en riesgo, valga la redundancia, por el riesgo que tiene su afección. Con lo que no estoy de acuerdo es que no se acepte que hay gente con determinados volúmenes corporales que generaron problemas de obesidad, y que no se reconozca la obesidad como enfermedad. Nosotros no buscamos que los paciente tengan un peso ideal, sino que puedan bajar de esa obesidad grave; más o menos el 70% del sobrepeso. Con esa pérdida, sabemos que el paciente va a mejorar de sus afecciones.
- Por el cambio físico que se produce, en las redes también se romantiza mucho la cirugía...
- Lo que impacta visualmente es el cambio físico, pero lo que buscamos nosotros es lo que nadie ve, lo que pasa “por dentro”. Después de la cirugía, se controlan algunas patologías. Y quizá, una persona que consumía medicación, por ejemplo, la puede disminuir...
- Además se ve como una solución mágica...
- Claro. Ningún cirujano bariátrico le va a sugerir a un paciente un procedimiento que le vaya a solucionar la vida. Yo te opero, para que bajes de peso y soluciones los problemas metabólicos, pero se puede reganar peso si no te adherís a lo que se debe hacer.