“El Consejo de la Magistratura debe ser ágil”

Aunque todavía restan definirse las fechas en las que el Congreso sesionará de manera extraordinaria, la reforma del Consejo de la Magistratura aparece como uno de los proyectos de mayor trascedencia. A mediados de diciembre de 2021, la Corte Suprema de Justicia declaró la inconstitucionalidad de la ley, que había sido promovida por la entonces senadora Cristina Fernández de Kirchner para acrecentar la representación de los puestos políticos, y redujo de 20 a 13 los miembros del organismo que tiene un rol trascendental en la selección y sanción de los jueces de la Nación. Ante este fallo, el Gobierno ya elevó un proyecto que contempla sumar cuatro nuevo integrantes al cuerpo, pero ayer se presentó un anteproyecto que pretende devolverle al Consejo el espíritu que le otorgó la Constitución de 1994 y de esa forma “asegurar la independencia de los jueces y la eficaz prestación de los servicios de justicia”.

La iniciativa que impulsan desde 29 entidades, donde confluyeron colegios profesionales y organizaciones intermedias de la sociedad civil, “no busca como fin último o único la mencionada despolitización, sino que desde ahí intenta, por un lado, construir un Consejo de la Magistratura más profesional, equilibrado, ágil y transparente; y, por otro lado, consolidar la garantía de división de poderes y una justicia independiente”, explicaron.

Consultado por LA GACETA por la iniciativa que presentó el kirchnerismo para reformar el Consejo, Guillermo Lipera, representante de Idea, aseguró que dicho proyecto surgió de manera “forzada” a raíz de la resolución tomada por la Corte Suprema. “Creemos que mejora en algunos aspectos lo que tenemos, pero no representa del todo lo que plantea la reforma constitucional de 1.994”, dijo.

Por su parte, Alberto Garay, presidente del Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires, destacó que la importancia de este tema radica en el servicio de justicia que tendrá el país. “El Consejo va a designar a las ternas que luego elegirán a los jueces federales y ellos estarán en sus cargos entre 20 y 40 años. Según cómo se conforme el Consejo será el Poder Judicial que tengamos”, manifestó. Finalmente, el constitucionalista exclamó en los últimos años la elección de jueces se transformó en un “reparto político” y “terminamos volviendo al lugar de donde nos sacó la reforma del 94’”.