El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, no se presentó a declarar este viernes, después de que un juez del Tribunal Supremo Federal (STF) lo citara y ordenara a la policía federal interrogarlo en una investigación sobre una filtración de documentos.
El procurador general del Gobierno, Bruno Bianco, acudió en lugar de Bolsonaro y presentó un amparo ante el STF apelando la citación del juez Alexandre de Moraes, pero el magistrado archivó el pedido diciendo que era demasiado tarde.
Anoche, Moraes ordenó que el presidente se presentara en la sede de la policía federal en Brasilia el viernes por la tarde para ser interrogado porque el plazo de 60 días que le había dado a Bolsonaro para declarar había expirado.
La defensa del presidente argumentó que el STF había dictaminado en dos casos anteriores, en los que personas citadas no se habían presentado a declarar, que la coacción para obtener esos testimonios era inconstitucional.
El caso se refiere a la filtración por parte del presidente de una investigación policial secreta sobre un hackeo contra el Tribunal Superior Electoral, la máxima autoridad electoral de Brasil, unos meses antes de las elecciones presidenciales que ganó en 2018. (Reuters)