El Papa emérito Benedicto XVI no tomó medidas contra clérigos en cuatro casos de presuntos abusos sexuales en su arquidiócesis cuando era arzobispo de Múnich, según ha revelado un informe, lo que agrava el escándalo que envuelve a la Iglesia católica.
El bufete de abogados de Múnich Westpfahl Spilker Wastl (WSW) recibió en 2020 el encargo de investigar las denuncias de abusos sexuales en la arquidiócesis de Múnich y Frisinga entre 1945 y 2019.
El informe, encargado por la arquidiócesis, señala que había al menos 497 víctimas de abusos, principalmente hombres jóvenes. Muchos otros casos probablemente no habían sido denunciados, estimaron los abogados.
También encontró culpables al actual arzobispo de Múnich, el cardenal Reinhard Marx, de 68 años, en dos casos sospechosos. Marx, quien no es sospechoso de haber participado en los abusos, pidió perdón hoy a las víctimas.
"Como actual arzobispo, pido disculpas en nombre de la arquidiócesis por el sufrimiento causado a las personas en el entorno de la iglesia en las últimas décadas", dijo Marx en un comunicado.
El arzobispo Georg Gänswein, antiguo secretario del Papa, contó que Benedicto acababa de ver el informe y que "daría al texto la atención necesaria" en los próximos días.
Benedicto XVI, ahora de 94 años, ha estado viviendo en el Vaticano desde que renunció como pontífice en 2013.
"El Papa emérito, como hizo a menudo durante su pontificado, expresa su conmoción y vergüenza por los abusos de menores por parte de clérigos", dijo Gänswein, añadiendo que Benedicto rezaba por las víctimas.
En un comunicado en el que no se menciona al Papa emérito, el Vaticano afirmó que evaluaría el informe completo y examinaría sus detalles.
"Al reiterar un sentimiento de vergüenza y remordimiento por los abusos de menores por parte del clero, la Santa Sede asegura su cercanía a todas las víctimas y confirma el camino que ha tomado para proteger a los menores y garantizarles un entorno seguro", comunicó el portavoz Matteo Bruni.
Los abogados del bufete se encargaron de averiguar quiénes conocían lo ocurrido en la arquidiócesis y las medidas que tomaron. La atención se ha centrado en Joseph Ratzinger, más tarde Papa Benedicto XVI, quien fue arzobispo de Múnich y Frisinga entre 1977 y 1982.
Al presentar el informe, el abogado Martin Pusch dijo que Ratzinger no había hecho nada contra los abusos en cuatro casos y que no parecía haber mostrado ningún interés por los perjudicados.
"En un total de cuatro casos, hemos llegado a la conclusión de que el entonces arzobispo cardenal Ratzinger puede ser acusado de mala praxis en casos de abuso sexual", afirmó Pusch. "Él sigue alegando ignorancia, aunque, en nuestra opinión, eso es difícil de conciliar con la documentación".
Los abogados también acusaron al cardenal Reinhard Marx, arzobispo de Múnich y Freising desde 2008, de mala praxis en dos presuntos casos de abuso. El año pasado, el Papa Francisco rechazó una oferta suya de dimitir como arzobispo por la crisis de los abusos.
La arquidiócesis declinó hacer comentarios inmediatamente, pero debe dar una respuesta completa al informe la próxima semana.
En 2018, la Iglesia católica alemana, que se encuentra entre las más ricas del mundo gracias -en parte- a los impuestos eclesiásticos que pagan sus miembros, se disculpó con las víctimas después que un informe descubriera que los clérigos habían abusado de unas 3.700 víctimas durante siete décadas hasta 2014.
El año pasado, un informe sobre la arquidiócesis de Colonia entre 1975 y 2018 descubrió a 202 abusadores y 314 víctimas y dijo que los funcionarios de la Iglesia habían fallado en sus deberes en unos 75 casos. (Reuters)