El Congreso estadounidense ordenó al Departamento de Estado una investigación sobre el asesinato del ex presidente de Haití Jovenel Moise.
El Senado votó anoche por unanimidad que el Departamento de Estado emita un informe en un plazo de 180 días con una "descripción detallada" de las circunstancias que rodearon al magnicidio.
El informe, ya autorizado por la Cámara de Representantes, también analizaría si hubo alguna interferencia en la investigación oficial y si alguno de los responsables del crimen trabajó en algún momento para el Gobierno estadounidense.
A principios de este mes, la fiscalía acusó al exsoldado colombiano Mario Palacios de conspirar para secuestrar o matar a Moise en una operación en la que murieron tres mercenarios colombianos y otros fueron detenidos.
Al día de hoy persisten los interrogantes sobre el móvil del asesinato de Moise, quien había prolongado su mandato en medio de gran polémica, ya que la oposición estimaba que su período de gobierno había concluido en febrero.
Según la policía colombiana, los detenidos de esa nacionalidad declararon que tenían previsto secuestrar a Moise y entregarlo a la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos.
El actual primer ministro de Haití, Ariel Henry, afirmó recientemente que pretende "que triunfe la justicia por el asesinato infame".
La ley aprobada por el Congreso también exige que el Departamento de Estado informe sobre la situación de los derechos humanos en Haití y el destino que tuvo la ayuda enviada desde Estados Unidos para afrontar el terremoto que devastó al país caribeño en 2010.