26 Diciembre 2021
DIRIGENTE. Arquez junto a Ricardo López Correa, su par de Buenos Aires y a Iván Troitiño, secretario de Ufedet.
En la memoria de Augusto Arquez está latente la energía que destinó cuando era pequeño en el periódico barrial. También, en la escuela Mitre, siguió asomando con más ímpetu ese espíritu de líder. El sentimiento siguió en ascenso cuando ingresó a la Facultad de Derecho. Fue en el deporte donde canalizó totalmente esa faceta. “Formalmente, hace más de 15 años que estoy en lo dirigencial cumpliendo distintos roles en mi querida Asociación Tucumana de Tenis”, especificó Arquez que está terminando la tesis en Gestión Deportiva.
“El tenis no es una isla, hay que seguir trabajando y mejorando procurando que sea un deporte cada vez más popular”, explicó su filosofía. Lo que postula Arquez es el concepto con el que trabaja cada federación del tenis alrededor del mundo. “Queremos canchas en todos los rincones”, afirmó con entusiasmo.
“Cuantas más canchas, habrá más bases formativas y más profesores. Así también ayudará traer competencias de relevancia, como la que tendremos en febrero gracias al apoyo enorme de Mercedes Paz. Nos servirá de espejo y de guía para el desarrollo de la práctica y de la enseñanza”, aseguró. Arquez, junto a la ex tenista y un grupo de colaboradores, trabajan intensamente para los torneos femeninos internacionales que se disputarán en el Tucumán Lawn Tennis y Las Lomitas.
LA FAMILIA. El trío Arquez, Candelaria, Augusto y Salustiano, disfrutando un viaje.
Aunque naturalmente está dotado con una actitud activa para tantas responsabilidades, el abogado necesita y tiene una ayuda “extra”. “Mi familia”, destacó voluntariamente. Mi hijo Salustiano, de 4 años, engloba en sólo un metro, mi motor y mi alegría. Y mi compañera de vida y esposa, Candelaria Güiraldes... no cabe dudas que sin su apoyo, persistencia y amor, nada de lo que emprenda sería posible”, reconoció el dirigente.
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