Esta tarde se presentaron ante la justicia y quedaron detenidos los tres efectivos acusados de disparar y matar a Lucas González, un joven futbolista de Barracas.
Se trata del inspector Gabriel Isassi, el oficial mayor Fabián López y el oficial José Nieva, quienes se desempeñaban en la División Sumarios y Brigadas de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad y se presentaron esta tarde luego de que el juez Martín Carlos Del Viso firmó las órdenes de detención.
Los tres quedaron detenidos, acusados del delito de "homicidio agravado por haber sido perpetrado por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones", el cual prevé la pena de prisión perpetua en un futuro juicio oral.
En tanto, la autopsia realizada al cuerpo del adolescente de 17 años en la sede del Cuerpo Médico Forense, reveló que recibió un proyectil de arma de fuego en el cráneo que le provocó una "hemorragia meningoencefálica" y un surco en el pómulo derecho de una segunda bala.
Además, los fiscales pidieron que se dicte el secreto de sumario y rechazaron las eximiciones de prisión que habían solicitado los tres policías involucrados a través de su abogado, Alfredo Oliván.
Para rechazar ese planteo, el fiscal Gómez Barbella y el fiscal Heim consideraron que los imputados "tergiversaron los hechos al momento de informarlos a la autoridad judicial para mejorar su situación procesal, circunstancia que daría cuenta no solo de su voluntad de sustraerse del proceso penal que se le sigue, sino también entorpecer la investigación".
También, entendieron que, estando en libertad, los policías pueden "amedrentar y hostigar a testigos y familiares, más aun conociendo los pormenores de un proceso penal por la función propia".
"Cabe destacar que este riesgo se torna especialmente grave en investigaciones vinculadas a delitos como los que nos convocan, en los cuales no pueden descartarse que, por su entidad, haya causado repercusiones psíquicas en las víctimas, que impacten negativamente sobre su voluntad de colaborar y testimoniar en el marco de la investigación, en caso de que la libertad de los imputados no sea restringida de momento", señalaron.
En tanto, el fiscal Barbella se comunicó con Cintia, la madre de Lucas, para darle su apoyo y comunicarle todas las novedades de la causa. Además, puso a disposición de las familias a los profesionales de la Dirección de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas (DOVIC) del Ministerio Público Fiscal.
Tras conocerse el pedido de detención de los policías, Mario, padre del adolescente, dijo que espera que "se cumpla eso", ya que la única forma que su hijo "descanse en paz va a ser cuando estén presos y condenados", por lo que continuará "la lucha el lunes con la marcha a Tribunales y el reclamo de cárcel para los asesinos".