El desafío ahora es cambiar el rumbo económico

El desafío ahora es cambiar el rumbo económico

El consultor Víctor Bono afirma que el Gobierno fomentó la especulación y la salida de capitales al no tener un “master plan”. El efecto “sensaciones”.

PRIORIDAD. Los analistas citan al acuerdo con el FMI como un objetivo para recomponer la confianza de los mercados y estabilizar la economía. PRIORIDAD. Los analistas citan al acuerdo con el FMI como un objetivo para recomponer la confianza de los mercados y estabilizar la economía.

Con los resultados de las elecciones definidos, las expectativas sobre lo que pasará con la economía se irán develando en las próximas horas. La incógnita del “día después” dejó el escenario político y se trasladó ahora a los hechos, donde la realidad se proyecta en el análisis de los especialistas con la vista puesta en la reacción oficial y de los ahorristas e inversores.

Al respecto, el consultor tributario y económico Víctor Hugo Bono nombró los principales problemas que llevaron a la actual situación política, las variaciones económicas en el corto plazo y lo que podría ocurrir hasta las elecciones de 2023. “Argentina carece de un ‘master plan’, un proyecto nacional, libre de matices ideológicos. Este Gobierno no tiene -y se ufana de ello- un plan para sus cuatro años de gestión. Mientras eso no ocurra habrá más lugar para las especulaciones y operaciones de coyuntura, y para inversores (extranjeros o vernáculos) o ‘huidores golondrina’ de capitales”, sostuvo.

Apuntó que un claro guiño de Juntos por el Cambio, similar al de las PASO, alumbrará posibles subas de acciones de empresas argentinas o radicadas en el país. “Y hasta una baja del dólar ‘blue’”, remarcó.

“Todo tendrá efecto ‘sensación’, muy volátil y sujeto a nuevas ‘ondas’ en el escenario económico. Nada será permanente ni conducirá a promover la inversión productiva generadora de crecimiento y de empleo. Con un simple achique de las diferencias no se pasa al triunfo. Todo lo contrario. Siempre habrá especulaciones. Seguirá la discusión sobre ‘modelos’, nunca de rumbos de la economía”, subrayó Bono.

“Existen reglas económicas básicas en cualquier Estado, como las referidas a ‘cuánto produzco’, a ‘qué costo’, ‘cuánto gasto’ y ‘qué nos queda’. Luego de esto, lo que viene es ‘cómo lo gasto o cómo lo distribuyo’. Y aquí sí, intervienen las pautas ideológicas. Pero antes de eso, nunca”, explicó.

Bono planteó la situación en el contexto mundial. “Comparándonos con los vecinos de Sudamérica, salvo Venezuela, a la situación señalada ya la entendieron. Son razonablemente estables y tienen una inflación mínima. Es imposible repartir un pastel inexistente”, resaltó.

“Quién o quiénes logren convencer sobre la necesidad de imponer una ‘hoja de ruta’ previa, exenta de ideologías, tendrá la llave de la solución a gran parte de los problemas de la economía. Acentuar, o sea ratificar el ‘modelo’ del Gobierno después de una derrota electoral, conducirá a un abismo imposible de evitar”, advirtió.

Y preguntó: ¿cómo transitar estos dos años que faltan de gestión? “Hay una imperiosa necesidad del Ejecutivo de un acuerdo con el sello que dice que puede ‘perder el poder’ en 2023. Es que si no lo hace la política lo hará el inexorable peso de la realidad”. Y redobló la advertencia: “serán tiempos difíciles; seguramente la oposición no dejará de cargar este costo al actual Gobierno”.

“El gran problema es, al llegar a 2023, cómo hará para no repetir la gestión de Mauricio Macri, entonces acuciada por el miedo a otro retorno populista -sostuvo Bono-. Esto, además de otros errores, condicionaron el fracaso de Juntos por el Cambio en el lapso entre 2015 y 2019”.

Según Bono, este es el enorme desafío de la oposición, que inevitablemente surgirá de una coalición parecida a como nació Todos por el Cambio, y deberá seducir al caudal K residual para ganar. “De otra manera, solos, será imposible”, definió.

Finalmente, describió lo que será la consecuencia de mirar para otro lado y no leer el mensaje de las urnas. “El mercado estará atento ahora a las reacciones del Gobierno, aguardando racionalidad. Si esa reacción es histérica, como fue luego de las PASO, tendremos una primavera cambiaria y desaceleración de la inflación efímera”, opinó.

Otros analistas indicaron que el desafío post electoral será mejorar la calidad de vida de los argentinos mientras se corrige la macro y se llega a un acuerdo con el FMI por la deuda externa. Además de la cruda realidad con los datos de pobreza e indigencia, citan como materias pendientes la inflación, dólar, empleo, salario, poder adquisitivo, productividad y puja distributiva.

El arreglo con el FMI es clave: lo ideal sería cerrarlo antes de marzo

Alberto Bernal, jefe global y estratega para mercados emergentes de XP Investment, señaló que los bonos del Gobierno argentino podrían experimentar un rally si el país logra cerrar otro acuerdo con el FMI antes de marzo, cuando tendrá que enfrentar vencimientos de la deuda. Afirmó que los mercados anticipan un cambio de régimen y que si la Argentina no firma ese acuerdo la posibilidad de que el Gobierno de Alberto Fernández pueda ganar en 2023 son funestas. “Sin ese acuerdo, Argentina no es un país viable. Por eso, estamos casi convencidos de que habrá un acuerdo”, resaltó.

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