Si bien en Argentina se logró retrasar la expansión masiva de la variante Delta del SARS-CoV-2, el Ministerio de Salud nacional ya advirtió que esta cepa va en aumento entre los contagios registrados en la Argentina.
Es más, en Tucumán la propagación del Delta en Famaillá generó preocupación, al punto de haberse considerado la vuelta de un asilamiento preventivo en el pueblo tras confirmarse 16 casos.
Es que esta variante es el doble de infecciosa que el resto y puede provocar casos de covid-19 más graves que las anteriores. Por esto, todas las autoridades sanitarias del mundo insisten en que la mayoría de estos casos se observan en personas no vacunadas. Aunque la efectividad de las vacunas se vio afectada —se estima que en entre un 10% y un 30%—, estas siguen respondiendo bien a la infección contra cualquiera de las versiones del virus.
Pero las autoridades científicas advirtieron que la propagación descontrolada podría dar lugar a otras variantes que eludan la respuesta que estimulan las vacunas.
Entonces, qué diferencia hay entre el contagio con Delta y el de las otras variantes.
Hasta ahora, se mantienen la mayoría de síntomas originales del coronavirus. Aunque algunos menos comunes —como los estornudos— han escalado posiciones entre los más frecuentes. Y otros típicos, como la anosmia y la dificultad para respirar, aparecen con menos frecuencia o más tarde.
Estos datos provienen de una aplicación de seguimiento de síntomas de millones de pacientes con sede en Reino Unido, conocida como ZOE COVID. No obstante, tal y como explicita a Eat This, Not That!, el neumólogo Tom Yadegar, la diferenciación clínica entre variantes es casi imposible, excepto para realizar pruebas genómicas
Estos son cinco indicios que te ayudarán a diferenciar un caso Delta del virus original:
- Si contagiándote después de estar completamente vacunado tienes más síntomas, aunque sean leves, similares a un resfriado común o a la gripe.
- Los primeros síntomas aparecen en un orden diferente al original. Por lo general, las infecciones con covid-19 suelen ser leves y los síntomas aparecen entre los días 5 y 14, después de la infección y remiten en cuestión de una o dos semanas. Los cinco principales síntomas nuevos son el dolor de garganta, la tos persistente, el dolor de cabeza, la fiebre y la secreción nasal.
Los infectados con la variante delta no experimentan afecciones muy diferentes, pero sí que suelen sufrir más casos de náuseas, vómitos y diarrea.
- La enfermedad se parece mucho al resfriado común o a la gripe. Si bien no se pueden adjudicar todos los nuevos síntomas a la variante delta, lo cierto es que las últimas afecciones registradas en ZOE COVID Study se parecen más a las del resfriado común o a la gripe, que a las originales del virus. Ahora pueden ser más frecuentes síntomas como los estornudos, la secreción nasal o el dolor de garganta frente a la pérdida del olfato, por ejemplo.
-Desarrollas un caso más grave de covid-19 sin condiciones subyacentes. Una serie de factores incrementan las posibilidades de tener un caso grave: la edad, las enfermedades subyacentes e incluso el sexo. Pero con delta se han visto un aumento considerable de las hospitalizaciones y las muertes incluso en pacientes jóvenes y sanos.
-Extraños síntomas graves de los que han alertado las autoridades: gangrena, pérdida auditiva. Durante la propagación explosiva de la variante delta, que se ha convertido en la dominante en casi todo el mundo después de alpha, beta y gamma, en la India los expertos en Salud detectaron un incremento de inusuales síntomas: la gangrena, el hongo negro y la pérdida de auditiva. Sin embargo, dado el alcance y la falta de datos, no se ha podido calcular la incidencia de estos episodios raros en la población general.