Por Gustavo Rodríguez
16 Octubre 2021
El caso del tirador de Yerba Buena estuvo cargado de novedades. Gerónimo Helguera, acusado del crimen de Mariela Márquez, finalmente fue internado en el hospital Obarrio, después de que la Justicia enviara varios oficios. El fiscal Carlos Sale, que interviene en la causa, anunció que la junta médica que revisará al joven de 29 años se desarrollará el 29 de octubre e intervendrán cuatro especialistas. Por último, se conoció que la familia del autor del disparo mortal pidió reunirse con los parientes de la víctima, encuentro que por el momento no se realizó.
Se dirigió al sector del primer piso donde hay oficinas. Se cruzó con Márquez y pidió hablar con una persona. Como la joven que realizaba las tareas de limpieza no la conocía, llamó al guardia para que lo atendiera. En ese momento Helguera sacó el arma y le apuntó al guardia. Este le movió el brazo en el momento que realizó el disparo que terminó hiriendo mortalmente a la joven. Al escuchar el ruido, se presentó en el lugar el mozo y con el portero lograron reducirlo y quitarle el arma.
Los investigadores sostienen que podría haber planeado cometer una masacre en uno de los puntos y en el horario de mayor movimiento de gente que hay en ese lugar. Además, tenía una pistola Colt calibre 22 con nueve proyectiles y en la mochila tenía una caja con otras 29 balas. También llevaba un cuchillo tipo cazador de más de 20 centímetros de largo y tenía colocados protectores auditivos, instrumentos que se utilizan en las prácticas de tiros.
El jueves se realizó la audiencia. Ernesto Baaclini y Camilo Atim Antoni, los defensores de Helguera, pidieron que se suspenda la acusación en su contra porque entendían que todavía no estaba claro si correspondía que fuera imputado. El fiscal Pedro Gallo y el representante de la querella Cristian Hermosa se opusieron al planteo. La jueza Isabel Méndez ordenó que un médico forense lo revisara antes de tomar la decisión. El psiquiatra Gustavo Costal consideró que no estaba en condiciones de ser imputado y que a su criterio debía ser internado.
La magistrada explicó que tras haber escuchado al especialista correspondía hacer lugar a la internación, pero aclaró que la investigación continuará su curso. Ordenó el traslado de Helguera al hospital psiquiátrico Obarrio y que la institución remita un informe mensual sobre su estado.
Pero la orden de la jueza no se cumplió ayer. Los defensores plantearon el problema y la jueza Isolina Apás Perez de Nucci, el jueves ordenó su internación nuevamente. Al confirmarse ayer que la orden no se había cumplido, Méndez insistió con el pedido, medida que finalmente se cumplió. Por la tarde, Pérez de Nucci también dispuso que se le coloque una pulsera para controlar su estadía en el centro asistencial.
Junta médica
Por otra parte, el fiscal Sale informó a todas las partes que dos psiquiatras del Siprosa, uno del Ministerio Público Fiscal y otro del Ministerio de la Defensa fueron propuestos para revisar a Helguera.
Sale debe ordenar a los especialistas una serie de puntos que necesita que analicen. Tanto la querella como la defensa pueden solicitar que revisen otras cuestiones y designar un perito de parte para controlar el trabajo de sus colegas convocados por la Justicia.
La opinión de los médicos que convoca la Justicia es determinante, no así la de los peritos que pueden presentar informes con sus puntos de vista.
“Es un estudio importante porque somos profesionales del derecho que no entendemos de estas cuestiones. Normalmente, los convocados son personas especializadas en la matera y la opinión que emiten, son clave. Lo ideal es contar con un perito de parte, pero no sé si lo podremos afrontar”, indicó Hermosa representante la familia Márquez.
Un contacto
Ayer también se produjo otro hecho trascendental. Baaclini y Atim Antoni se comunicaron con Hermosa para anunciarle que la familia Helguera quería reunirse con los Márquez. “Hice el contacto, pero los parientes de Mariela pidieron un tiempo, ya que todavía no estaban preparados para juntarse con ellos”, explicó el profesional.
“En una opinión personal, creo que es un gesto importante. No puedo dejar de pensar que aquí hay dos familias que están sufriendo con esta verdadera tragedia que conmovió a todos los tucumanos”, concluyó Hermosa en una entrevista con LA GACETA.
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