Miriam Adriana Guzmán vive en Termas de Río Hondo, pero es tucumana y sigue enlazada a esta provincia. No sólo porque en Estación Aráoz, de donde es oriunda, su familia siempre la espera. Sino también porque cada vez viene más seguido desde la villa turística santiagueña para hacer visitas médicas y trámites burocráticos. Sucede que su hijo, Enzo Matías Ledesma (22), sufre neurofibromatosis tipo 2. "Es una enfermedad genética rarísima. De una en 10 millones de personas. Y bueno, nos tocó a nosotros", afirmó Miriam, resignada.
Si bien Enzo venía recibiendo su tratamiento, explicó la mujer, en los últimos tiempos los pequeños tumores que se desarrollaron en su cerebro comenzaron a crecer, y a ejercer presión en la zona. "Ayer, cuando se despertó a la mañana, tenía entumecidas las piernas. Está perdiendo la movilidad, y por eso la cirugía es urgente. Cuanto más presión hagan los tumores, mi hijo corre más riesgo de quedar cuadripléjico o de morir. Pero tengo fe en Dios, en que lo vamos a lograr hacer entrar al quirófano", explicó afirmó Guzmán a LAGACETA.com.
La mujer explicó que Enzo, en un momento, había sido tratado en el Garrahan de Buenos Aires, pero luego continuó con médicos de Tucumán. "El problema se da porque, desgraciadamente, el papá de mi hijo se quedó sin trabajo. Tenemos una obra social, que en realidad es una prestadora médica, que nos asignan por el fondo de desempleo. Y ellos dicen que no tienen convenio para nuestro plan en el sanatorio donde necesitamos que sea operado. Son todos unos temas burocráticos. Los trámites se supone que ya están en marcha, pero con suerte dentro de dos semanas me van a autorizar un electroencefalograma, que es otra cosa que me piden. No sé cuánto puede demorar todo. Y Enzo necesita esto con urgencia", relató.
Miriam contó que, si bien siguen haciendo gestiones ante la obra social y otras reparticiones, iniciaron los pasos para tratar de hacer que su hijo sea intervenido cuanto antes.
"Es una situación complicada. El papá de Enzo se quedó sin empleo y yo soy costurera; tengo mis otros hijos, pero no puedo costear una enfermera. La ayuda que estoy recibiendo de la gente me sirve un montón, porque, si bien el papá de los chicos acompaña, Enzo necesita cuidado permanente. De hecho, su medicación mensual cuesta $24.500", graficó
Según detalló, el costo de la cirugía es, por honorarios médicos e insumos, $ 1,1 millón; además, le anticiparon que deberá abonar unos $ 400.000 para solventar la terapia intensiva y la primera parte de la recuperación de Enzo.
Ante este contexto, la familia de Miriam decidió iniciar una colecta a través de los grupos de WhatsApp (CBU: 01105 16230 05161 41308 79).
"Sé que tenemos razón y que la obra social debería hacerse cargo. Pero la salud de mi hijo, en septiembre, ha desmejorado muchísimo. Estos trámites burocráticos nos complicaron todo, y necesitamos operarlo cuanto antes", añadió.