La mirada manzurista: “Estamos en una etapa de reacomodamiento después de un proceso intempestivo”

La partida de Juan Manzur los tomó por sorpresa. Ninguno de ellos pensaba en la posibilidad de que el gobernador deje transitoriamente su cargo para asumir como jefe de Gabinete de la Nación sin antes arreglar la situación interna de la provincia. Pocos creían que Osvaldo Jaldo, en definitiva, asumiría la conducción de la Provincia. Sin embargo, desde la cumbre del lunes, los manzuristas quedaron pasmados. Y siguen así, sin poder digerir el recambio previsto en la Constitución Provincial, tras una dura interna en la que desde Lealtad Peronista y desde Peronismo Verdadero se dijeron de todo, menos compañeros. “Hacer un análisis de lo que sucedió en lo político y en lo institucional acerca de lo que pasó esta semana es, cuanto menos, prematuro”, expresó a LA GACETA el legislador Gerónimo Vargas Aignasse. A su entender, tanto el manzurismo como el jaldismo ser está reacomodando. “Estamos en esa etapa después de un proceso intempestivo que se dio con el viaje del gobernador a Buenos Aires y la asunción de Jaldo que ahora está a cargo del Poder Ejecutivo”, puntualizó.

Vargas Aignasse reconoció, además, que los dirigentes de Lealtad Peronista están intentando digerir la complicada situación que viven con el cambio de conductor del Ejecutivo, a quien criticaron durante las PASO. “Hay una cuestión anímica de por medio”, acotó.

Sin embargo, resaltó que les pone muy contento el rol que viene desempeñando Manzur desde su asunción como jefe de Gabinete de ministros. “Eso es auspicioso para la Argentina en general, y para Tucumán en particular. No tengo dudas que su gestión contribuirá a revertir el cuadro electoral en algunos distritos del país, en especial en la provincia de Buenos Aires. También ayudará a mejorar la perfomance en La Pampa y en Chubut, donde están bancas del Senado en juego”, indicó. Vargas Aignasse no tiene dudas de que las elecciones del 14 de noviembre serán vitales para el Frente de Todos y para la gestión del presidente Alberto Fernández. “No tengo dudas de que a Juan le irá bien y que, por eso, se quedará en Buenos Aires, para seguir apuntalando la gestión”, finalizó.